
Como viene siendo habitual, BBVA ha recurrido a los mercados de capital en busca de dinero fresco. Hoy, ha completado la emisión de 2.000 millones de euros en cédulas territoriales en tan sólo dos horas, que colocó a un precio de 57 puntos básicos por encima de índice de referencia (midswap) y con un plazo de vencimiento de tres años. Es la primera emisión de este tipo de activos desde que empezó la crisis.
Según ha informado la entidad, la operación recibió una sobredemanda de 3.000 millones de euros, sobre todo extranjera, que de este total representaron 2.500 millones de euros. Finalmente, se ha colocado en el mercado europeo (85%), sobre todo en Francia (35%), Alemania (25%), España (15%), Reino Unido (15%), e Italia (5%).
La emisión fue suscrita por 125 inversores institucionales, como fondos de inversión y de pensiones, bancos centrales y aseguradoras, en un tiempo récord: cerró el libro de órdenes dos horas después de su apertura.
Se trata de la primera emisión de cédulas territoriales realizada por una entidad española desde que estalló la crisis. Este tipo de activos están garantizados por los préstamos y créditos concedidos por el emisor a las Administraciones públicas.
Según un experto consultado por Europa Press, "la emisión se ha culminado con éxito gracias a la solidez del emisor". Por su parte, desde la entidad que preside Francisco González se ha destacado que la buena marcha de la operación "responde a las fortalezas de BBVA así como a su reconocida calidad crediticia".
En lo que va de año, BBVA ha recurrido ya dos veces a la colocación de deuda. En enero, cerró una emisión de cédulas hipotecarias por 2.000 millones de euros a un plazo de siete años. Sólo un mes antes, BBVA había completado una emisión de bonos de deuda senior por 1.000 millones.