
El tráfico internacional de pasajeros se anotó en 2009 su mayor descenso desde la Segunda Guerra Mundial, según ha informado hoy la Asociación Internacional del Transporte aéreo (IATA). De acuerdo con sus datos, la demanda de transporte aéreo se redujo un 3,5% interanual, mientras que el índice de ocupación se situó en el 75,6%.
Por su parte, el tráfico de carga retrocedió en 2009 un 10,1% con respecto al año anterior, con un índice de utilización de 49,1%.
Mejoría en diciembre
En diciembre, el tráfico de pasajeros progresó el 1,6% (tras el ajuste estacional de las cifras) con respecto al mes anterior y el 4,5% con respecto a diciembre de 2008. El transporte de carga se mantuvo prácticamente en el mismo nivel en diciembre frente a noviembre, pero mejoró el 24,4% con respecto a un año antes.
Las compañías aéreas de Asia-Pacífico, Europa y Norteamérica experimentaron declives en la demanda de pasajeros del 5,6, 5,0 y 5,6%, respectivamente, aunque las asiáticas lograron remontar en diciembre, con un crecimiento del 8%. Por su parte, las aerolíneas de Europa y Norteamérica sufrieron una contracción del 1,2 y del 0,4%, respectivamente, en el último mes de la año.
Las compañías de Oriente Medio y Extremo Oriente lideraron el crecimiento del sector. En América Latina, el crecimiento de la demanda se estancó (0,3%), una situación que la IATA atribuyó al impacto de la pandemia de gripe en el segundo y tercer trimestre del año.
Enormes desafíos
"En términos de demanda, 2009 quedará marcado en los libros de historia como el peor año para la industria", declaró el presidente del organismo, Giovanni Bisignani. Sin embargo, se ha comenzado a constatar una recuperación gracias a las estrictas condiciones vigentes entre oferta y demanda de los últimos meses, aunque ese rendimiento sigue estando entre el 5 y el 10% por debajo de los niveles de 2008, destacan.
"La mejora de los ingresos se producirá a un ritmo mucho más lento que la subida de la demanda que estamos empezando a observar", agregó Bisignani. En su opinión, la rentabilidad "se recuperará aún más lentamente" y adelantó que las aerolíneas perderán unos 5.600 millones de dólares en 2010.
"La industria empieza 2010 con enormes desafíos. Lo peor quedó atrás, pero aún no es momento de celebrar. La pérdida de años de crecimiento significa que las aerolíneas enfrentan otro año espartano y que tendrán que hacer coincidir la capacidad y la demanda, así como controlar los costes", recalcó Bisignani.
El coste de la seguridad
Finalmente, el responsable de la IATA declaró que el aumento de las medidas de seguridad en los aeropuertos y los aviones -tras el atentado fallido de la pasada Navidad- implica también un asunto de costes.
Indicó que las aerolíneas ya gastan 5.900 millones de dólares anuales "en lo que esencialmente son medidas que conciernen a la seguridad nacional", por lo que instó a los gobiernos a asumir su responsabilidad financiera en ese sentido.