Sao Paulo, 19 mar (EFECOM).- La brasileña Petrobras se alió al grupo petroquímico Braskem y al distribuidor de gas Ultrapar para adquirir, por 4.000 millones de reales (unos 1.914 millones de dólares), el Grupo Ipiranga, uno de los mayores del país y con negocios en refino, distribución de combustibles y en petroquímica.
La millonaria negociación, una de las mayores en Brasil en los últimos años, fue confirmada hoy en una rueda de prensa en Sao Paulo, tras varios meses de negociaciones sigilosas.
El Grupo Ipiranga, uno de los mayores conglomerados empresariales de Brasil, posee una refinería de petróleo, la segunda mayor red de distribución de combustibles del país (4.240 estaciones) y destacada participación en el sector petroquímico, con una producción de unas 650.000 toneladas de resinas petroquímicas.
El mismo grupo comparte con la petroquímica Braskem el control de la Compañía Petroquímica del Sur (Copesul), la segunda mayor central de materias primas petroquímicas de Brasil.
El Grupo Ipiranga registró el año pasado ventas por 31.000 millones de reales (cerca de 14.832,5 millones de dólares) y ganancias líquidas por 534 millones de reales (unos 255,5 millones de dólares).
De acuerdo con la negociación, Ultrapar, el mayor distribuidor de gas licuado de petróleo de Brasil, asumirá los negocios de distribución de combustibles y lubricantes de Ipiranga en las regiones sur y sudeste, las más ricas del país y que incluye los estados de Sao Paulo, Río de Janeiro y Minas Gerais.
La transferencia convertirá a Ultrapar en el segundo mayor distribuidor de combustibles de Brasil después de Petrobras, con cerca del 15 por ciento del mercado.
Petrobras, por su parte, asumirá la red de distribución de combustibles de Ipiranga en las regiones norte, nordeste y centro-oeste de Brasil, lo que elevará significativamente su actual participación en el mercado, que es de cerca de 33,8 por ciento con 6.200 estaciones.
Braskem se quedará con el 60 por ciento de los activos en el área petroquímica del Grupo Ipiranga y Petrobras con el 40 por ciento restante.
La refinería de Ipiranga, una de las dos privadas que existen en Brasil y en la que tenían interés empresas como Petróleos de Venezuela S.A (PDVSA), será dividida en partes iguales por las tres empresas compradoras.
De acuerdo con el anuncio enviado hoy por las tres empresas a la Bolsa de Valores de Sao Paulo, la negociación tendrá cinco etapas y comenzará por la compra, por parte de Ultrapar, de las acciones del Grupo Ipiranga que poseen las cinco familias que controlan el conglomerado.
Los controladores de Ipiranga recibirán cerca de 2.000 millones de reales (unos 956,9 millones de dólares) por sus acciones.
Posteriormente, Ultrapar realizará una oferta pública de adquisición (OPA) sobre los papeles de los accionistas minoritarios de la red de distribución de combustibles Ipiranga, a los que les será ofrecido un precio equivalente al 80 por ciento del que fue pagado a los controladores.
Braskem y Petrobras, por su parte, realizarán una oferta pública de adquisición para quedarse con los papeles de los minoritarios en Ipiranga Petroquímica, que agrupa los negocios del grupo en esa área.
"En línea con su planificación estratégica, Petrobras refuerza su presencia activa en la petroquímica nacional, consolida sus posiciones en la distribución, y amplia su presencia en los varios segmentos en que actúa", afirmó el presidente de la petrolera estatal, José Sergio Gabrielli.
"El Grupo Ultra da otro importante paso en el crecimiento calificado de sus negocios. Con esta adquisición ampliamos significativamente nuestras operaciones en el área de distribución de combustibles", según Pedro Wongtschowski, presidente del Grupo Ultra.
"Con la iniciativa Braskem da un paso decisivo en el camino para convertirse en una de las diez principales empresas petroquímicas del mundo en valor de mercado", afirmó, a su turno, José Carlos Grubisich, presidente de Braskem.
La negociación aún dependerá de la aprobación de los organismos brasileños responsables de garantizar la libre competencia. EFECOM
cm/lb/pam