
La crisis financiera que atraviesa el Grupo Nozar, que le llevó a recurrir al concurso de acreedores, ha arrastrado a Viñedos y Crianzas del Alto Aragón - Enate a solicitar también el concurso voluntario, que ha sido declarado en el Juzgado de lo Mercantil número 8 de Madrid.
Un paso que desde la bodega, de la Denominación de Origen Somontano y con sede en Barbastro (Huesca), indica que es consecuencia directa de la situación económica del Grupo Nozar, "que nos obliga a solicitar la protección legal del concurso de acreedores para defender mejor los intereses de proveedores, acreedores, trabajadores y de la propia compañía". Enate espera salir reforzada de este proceso y continuar la actividad con normalidad.
La bodega, una de las joyas de Nozar a la que hasta este momento no le había afectado la díficil situación económica del grupo a diferencia de otros negocios que controla la familia Nozaleda en Aragón, como es el caso del Balneario de Panticosa, sacó pecho y aseguró que está al corriente de los pagos a los proveedores y empleados.
Además, el volumen de ventas de la bodega desde su creación en el año 1991 ha ido en aumento y en el último ejercicio ha obtenido resultados de ventas favorables. De hecho, en los últimos años, las ventas de esta bodega se han situado en torno a los 12,45 millones de euros.
De momento, la bodega Enate tiene previsto seguir manteniendo su actividad productiva y comercial, y espera también poder mantener los 45 puestos de trabajo fijos de la empresa, así como los otros 45 correspondientes especilizados en las tareas agrícolas y de recolección y producción del vino.
En la actualidad, la bodega Enate comercializa alrededor de una decena de productos vitivinícolas en 46 países de Europa, Asia y América, principalmente. El 30% de la producción total se destina a exportación, que supone casi el 30% de sus ventas en el exterior.