La compañía estadounidense de servicios petroleros se despertaba ayer con una sorprendente noticia, el traslado de su sede corporativa, actualmente asentada en Houston, Texas, a la cuna del oro negro, la ciudad árabe de Dubai.
Así lo daba a conocer ayer el propio consejero delegado de Halliburton (HAL.NY), David Lesar. Pese a que la portavoz de la compañía, Cathy Mann, aseguraba a la agencia AP que Halliburton mantendrá abierta su sede en Houston "el presidente del Consejo de Administración y el consejero delegado de la compañía desempeñarán sus funciones desde Dubai".
Lesar presentó esta mudanza como una estrategia de la compañía por centrarse en el hambriento continente asiático que engloba a algunos de los mercados de petróleo y gas más importantes del mundo.
Aún así, el consejero delegado tranquilizó a sus clientes estadounidenses afirmando que pese a que se trasladará a vivir a Dubai, "pasará el tiempo que sea necesario en un avión con tal de responder a las necesidades de los accionistas, clientes y empleados de la compañía".
