
Los Gobiernos de los 27 países de la UE pactaron la semana pasada la redacción de unas conclusiones que invitan a la Comisión Europea a "desarrollar cómo el sector privado podría contribuir a financiar las medidas de resolución de crisis en entidades bancarias, y a estudiar la posibilidad de crear fondos de resolución".
También le pidieron que tenga en cuenta "la elaboración de planes de relanzamiento y resolución propios a cada empresa, para sanear los bancos internacionales y la resolver sus crisis".
Es decir: el Ecofin -Consejo de Ministros de Economía y Finanzas de la UE- ha encargado al Ejecutivo comunitario que estudie la creación de fondos de depósitos europeos nutridos con los ingresos del sector bancario continental, para que las entidades y sus accionistas contribuyan a financiar las operaciones de reestructuración o de liquidación de las entidades en apuros. Bruselas debe presentar un informe a principios de 2010.
También hay acuerdo entre los 27 Gobiernos de la UE para que Bruselas concrete la idea de exigir a los bancos la redacción de los denominados testamentos vitales: una especie de libro de instrucciones o plan de emergencia en el que cada entidad desvela sus entrañas, y el camino más fácil para ser reestructurada, o liquidada total o parcialmente de manera ordenada.
Voladuras controladas de bancos en apuros
Objetivo: posibilitar una voladura controlada con el mínimo impacto posible sobre la estabilidad del sistema financiero, los presupuestos públicos, los clientes y los depositantes del banco en quiebra y sus acreedores, y el funcionamiento fluido de los sistemas de pago. El testamento vital facilitaría la labor de las autoridades públicas que deban intervenir un banco que se viene abajo. Y evitaría más desplomes generadores de pánico, como el de Lehman Brothers.
Las dos ideas que acaban de recibir el apoyo inicial de las capitales europeas y que también se debaten en el seno del G-20 y del FMI ?el fondo de garantía europeo y el testamento vital? figuran en una Comunicación presentada por Bruselas el pasado 20 de octubre bajo el título Un régimen comunitario para la gestión transfronteriza de las crisis en el sector bancario.
En tal documento, Bruselas explicó que "quedan importantes lagunas que podrían colmarse con competencias armonizadas para que los supervisores puedan exigir a las entidades financieras de importancia sistémica la elaboración de planes propios de emergencia y resolución ?testamento vital?, en los que se detalle cómo una entidad y su actividad podrían desmantelarse y liquidarse rápida y ordenadamente".
Tasas sobre los bancos
La Comunicación de Bruselas también señala que "sería conveniente estudiar la posibilidad de crear mecanismos que garanticen la disponibilidad de fondos del sector privado en periodos de crisis". Añade que "entre las funciones de los sistemas de garantía de depósitos podría figurar financiar medidas de resolución"; subraya que "la ventaja sería que el sector bancario contribuiría directamente a garantizar su propia estabilidad".
Y puntualiza que "esto no debe impedir que se indemnice a los depositantes minoristas en casos de quiebra". Bruselas anuncia que explorará ?la idea de crear un fondo para la resolución de crisis, que podría nutrirse de tasas aplicadas al sector en función del tamaño de la entidad o de su actividad de mercado?.