BRUSELAS (Reuters) - Los líderes de la Unión Europea comenzaron un día de duras negociaciones para superar sus diferencias sobre el presupuesto a largo plazo del bloque, mientras algunos dicen que el acuerdo, largamente esperado, es posible pero aún está lejos de ser definitivo.
El ministro de Exteriores británico, Jack Straw, se mostró reacio a hablar de las opciones de éxito a su llegada a la cumbre, pero reconoció que Reino Unido podría tener que desplazarse en su postura.
"El margen para variar es estrecho", añadió.
También impediría que los nuevos estados miembros usaran los robustos fondos disponibles para modernizar sus economías y situarlos en línea con sus vecinos occidentales.
"Las conversaciones son muy, muy duras en el auténtico sentido de la palabra", dijo a los periodistas". "No puedo dar una previsión en esta fase".
A última hora del jueves, tras la primera ronda de conversaciones, el primer ministro sueco, Goran Persson, estableció las opciones de un acuerdo "al cincuenta por ciento".
Straw dijo que la nueva propuesta británica se presentaría sólo tras una serie de entrevistas bilaterales durante la mañana para tratar de hallar nuevo margen de maniobra. Otros asuntos en la agenda, como las esperanzas de entrada de Macedonia y un acuerdo sobre el impuesto sobre el valor añadido en el sector servicios, se han dejado a un lado para dar más tiempo a la negociación presupuestaria.
