AMSTERDAM (Reuters) - Alemania ha sacrificado a cerdos de cinco granjas y cientos de fincas en Bélgica y Holanda seguían el miércoles en cuarentena mientras las autoridades investigaban los niveles de la dioxina cancerígena en carne de cerdo.
Más de 650 granjas, entre ellas algunas que crían pollos, han estado en cuarentena en Holanda, Bélgica y Alemania desde la semana pasada, cuando surgieron las primeras noticias. Los productos de las granjas no pueden venderse o ser transportados mientras la orden siga en vigor.
"La carne de las granjas afectadas se vendió en tiendas (..) pero el hecho de que la dioxina esté por encima de lo normal en los piensos animales no significa automáticamente un riesgo directo para la salud", dijo Pascal Houbaert, portavoz del organismo de seguridad alimentaria belga AFSCA.
Las autoridades dijeron que no iban a retirar la carne de los establecimientos de los dos países.
Holanda es uno de los principales productores de piensos animales de Europa, mientras que Bélgica también es un importante exportador de cerdos. Corea del Sur prohibió las importaciones de ambos países la semana pasada.
Los piensos contaminados han originado varias crisis alimentarias en el oeste de Europa, como el hallazgo de dioxinas en piensos animales elaborados con patata en 2004, una hormona ilegal en cerdos de Holanda en 2002 y un escándalo en Bélgica en 1999 con dioxinas en pollos.
