El presidente de Caja Madrid se mueve con urgencia en las últimas semanas para intentar perpetuarse en el poder de la entidad durante otros seis años. Miguel Blesa sabe que sólo una fusión con otra entidad podría salvar su silla en el consejo de administración de la institución financiera.
Pero también conoce que el tiempo corre en su contra. Tras fracasar en su primer intento de absorber parte de Caixa Catalunya, tantea ahora las posibilidades de lleva a cabo una integración con Caixa Galicia.
Según ha podido saber este periódico en fuentes de toda solvencia conocedoras de la situación, Blesa se ha acercado a la entidad gallega para explorar una operación de concentración. Estas mismas fuentes señalan que ya se han producido algunas reuniones y que las negociaciones están abiertas.
Una operación con Caixa Galicia aumentaría la dimensión de Caja Madrid hasta un tamaño algo inferior al de La Caixa. De hecho, tras esta posible fusión, el grupo resultante ostentaría el segundo puesto en el ranking de las cajas y contaría con un volumen de activos cercano a los 227.596 millones.
En este sentido, Caixa Galicia ha manifestado últimamente su posición expectante a losmovimientos del sector. Fuentes oficiales de la caja aseguraron a este periódico que "no les constaba ningún tipo de contacto ni el interés por una fusión con Caja Madrid u otra".
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Caja Madrid se plantea alguna adquisición