ESTRASBURGO, Francia (Reuters) - El Parlamento Europeo adoptó el jueves una directiva diluida para abrir los servicios a la competencia transfronteriza, tras una amarga batalla entre los partidarios del libre mercado y los que piden mantener la protección social.
La Eurocámara adoptó por 394 votos a favor y 215 en contra una versión bastante modificada tras retirar el disputado principio del "país de origen", bajo el cual las compañías que pueden proporcionar servicios en otro país comunitario hubieran podido hacerlo con las normas de su nación de origen.
El compromiso permite a los países miembros prohibir operar a cualquier proveedor de servicios de varias áreas, siempre que esa intervención no discrimine y sea proporcionada.
"Hemos invertido esta directiva. Hemos logrado centrarnos en la protección social de nuestros ciudadanos y nuestros países miembros", dijo la diputada socialista alemana Evelyne Gebhardt.
La Confederación Europea de Sindicatos calificó el acuerdo de "una verdadera victoria para los trabajadores europeos". En cambio, la principal patronal, la Unión de Confederaciones de la Industria y de los Empleadores de Europa (UNICE), dijo que "se ha privado a la directiva de su capacidad para crear empleos y crecimiento en Europa".
La controversia ha enfrentado a los defensores del libre mercado como Reino Unido y los nuevos miembros del este de Europa - a los que se unió España la semana pasada- con los partidarios de la protección social en países como Francia, Alemania y Austria, donde los votantes temen un aluvión de empresas y trabajadores que trabajan más horas por un salario menor.
La Comisión Europea, que defendió la llamada directiva Bolkenstein por el ex comisario holandés que la propuso para impulsar el empleo y la competitividad, dijo en un comunicado que comenzará a trabajar en la propuesta modificada.
/Por Huw Jones/