PARÍS (Reuters) - Cientos de miles de jóvenes y trabajadores se manifestaron el martes en Francia para protestar contra un plan de empleo juvenil que ha provocado la caída en la popularidad del primer ministro, Dominique de Villepin.
El principal sindicato, CGT, situó la cifra de manifestantes en un millón, 200.000 de los cuales asegura que asistieron a la marcha en París. En Marsella, una pancarta que decía "Contrato para esclavos" encabezaba la manifestación que se extendió por 2,5 kilómetros.
El CPE es una nueva modalidad de contrato reservada a los menores de 26 años que establece un periodo de pruebas de dos años, durante los cuales el empresario podrá despedir al trabajador sin dar un motivo.
El primer ministro defendió el plan en la Asamblea Nacional, pidiendo a Francia que sea valiente y dé pasos para seguir avanzando en un mundo en cambio.
El líder del grupo socialista, mayoritario en la oposición, Jean-Marc Ayrault, respondió: "La cuestión es fácil. ¿Va a escuchar al pueblo francés? ¿Va a retirar el contrato ahora?"
"No permitiremos que se plasme en la ley francesa que los trabajadores puedan ser despedidos con un chasquido de los dedos", declaró Bernard Thibault, líder de la CGT.
