PARÍS (Reuters) - El presidente francés, Jacques Chirac, pidió el viernes conversaciones urgentes entre el Gobierno y los sindicatos sobre la ley de empleo para jóvenes después de que las protestas de París contra la medida finalizaran con arrestos y violencia.
Los sindicatos y las asociaciones de estudiantes planean nuevas acciones el sábado y esperan aumentar la presión sobre el primer ministro, Dominique de Villepin, llevando a más de un millón de personas a las calles, y superando así la asistencia de las manifestaciones del 7 de marzo.
"Esta manifestación debe desarrollarse con calma y respeto por todos", dijo Chirac de la protesta prevista en el centro de París.
La oposición a la ley le ha hecho bajar en las encuestas de aprobación, afectando a su partido, el UMP, y amenazando su ambición, escasamente disimulada, de presentarse a la presidencia en 2007.
"Todos queremos que los estudiantes puedan prepararse para sus exámenes en paz y sean capaces de estudiar libremente", dijo el viernes tras reunirse con rectores universitarios.
El Gobierno dijo a la Fiscalía que lidiara con firmeza con los implicados en los enfrentamientos, que dejaron un puñado de escaparates de tiendas y cafés de París rotos y 92 personas heridas. La policía usó gases lacrimógenos y cañones de agua para reducir la violencia y de los 187 personas detenidas, 71 continuaban bajo arresto el viernes.
/Por Anna Willard/