Existen dos hechos en la historia que van a ser la piedra angular sobre la que construirán su defensa los imputados. El primero es que sí se tuvo en cuenta el cambio de circunstancias cuando se hizo efectiva la venta del 3,7 por ciento de Xfera a Telvent. El contrato de opción de compra firmado en 2000 explicitaba un coste de 19 millones de euros por el nominal de las acciones, más una prima de 3 millones, más un sobreprecio de entre 30 y 40 millones por las plusvalías que se preveía obtener.
En diciembre de 2001 se eliminó la prima de 3 millones, y un año después se suprimió la sobreprima de 30 a 40 millones. Finalmente se pagaron 25 millones, que es el nominal de las acciones más los costes de constitución de los avales.
¿Avales? Sí. La segunda clave es el contrato de indemnidad firmado por IC y su participada Abengoa en octubre de 2000, por el que IC se comprometía a hacerse cargo de cualquier coste en que incurriese Abengoa por el riesgo de su participación en Xfera. En aquella época, el riesgo era ejecución de avales. El gobierno español había entregado baratas las licencias, pero los avales que respaldaban los compromisos eran muy cuantiosos. Xfera tuvo que garantizar 3.000 millones de euros, y la participación de IC suponía avalar 111 millones.
Falta de liquidez
El banco que respaldó ese aval a finales de 2000 para IC fue el Chase Manhattan Bank. Su garantía caducaba en diciembre de 2002, momento en que el Chase ya estaba en manos de JP Morgan, quien no renovó la póliza ni aceptó que la contragarantizara la Confederación Española de Cajas de Ahorros.
IC no tenía liquidez para aportar los 111 millones. Abengoa sí podía respaldarlos por la caja que generaba. Pero al colocar en el pasivo de Abengoa esa cantidad había que equilibrar el balance por el lado del activo. ¿Cómo? Con las acciones de Xfera.
Telvent hizo una valoración del negocio que podía recibir por ser accionista de Xfera y la cuenta le dio unos 40 millones entre 5 y 8 años. El consejo de Telvent votó sí. ¿Valía cero? El año pasado se valoró Xfera en 475 millones cuando compró la mayoría la sueca Telia. La parte de Telvent: 22 millones.