QUITO (Reuters) - El presidente de Ecuador, Alfredo Palacio, planteó el viernes al Congreso reducir del 60 al 50 por ciento la porción de los ingresos extras que deberán entregar las petroleras extranjeras al país, mediante un veto parcial a una reforma a la Ley de Hidrocarburos.
Entre las empresas petroleras potencialmente afectadas por la reformas se encuentran la estadounidense Occidental Petroleum y la española Repsol-YPF.
"El veto parcial vuelve al espíritu inicial de la propuesta del Ejecutivo. Está accediendo a los ingresos extraordinarios del negocio petrolero", dijo el ministro de Economía, Diego Borja a periodistas.
El Congreso deberá analizar el veto parcial de Palacio en 30 días. La decisión legislativa será el último paso para la puesta en vigencia de la reforma, que ha causado escozor entre las petroleras y desatado amenazas de reducir su exposición e inversiones en el quinto productor de crudo de Sudamérica.
La reforma generaría en el segundo semestre alrededor de 250 millones de dólares para las arcas fiscales, afectadas por onerosos subsidios estatales sobre los precios de los combustibles, mientras que las empresas gozan de ingentes ingresos por los altos precios del crudo.
Sin embargo, Borja insistió en que la modificación de la ley era la única manera de restablecer el equilibrio económico de los contratos que se vieron alterados por el repunte de los precios mundiales del crudo a partir del 2002, por las tensiones políticas mundiales.