DOHA (Reuters) - Los ministros de la OPEP reconocieron el lunes que no pueden hacer nada para detener la escalada de los precios del crudo, que amenaza a las economías de los países consumidores y podría provocar un colapso de la demanda que sería desastroso para las naciones productoras.
"El mercado determina el precio del crudo", dijo a periodistas el ministro de Petróleo de Arabia Saudí, Ali Al-Naimi, la voz más influyente de la Organización de Países Exportadores de Petróleo.
El crudo marcó un máximo histórico de más de 75 dólares por barril la semana pasada debido a que Irán continúa desafiando la presión mundial por detener su programa nuclear, a que un cuarto de la producción de Nigeria está paralizado por ataques de rebeldes y porque cayó en crisis la una vez considerada fuerte industria petrolera de Irak.
En tanto, los productores temen un colapso en los precios.
Actualmente, al igual que en septiembre, la escasez de combustible para motor en Estados Unidos, consumidor de más del 40 por ciento de la gasolina mundial, es una causa del alza en los precios.
Algunos delegados de la OPEP dicen que la política exterior estadounidense tiene buena culpa de la situación.
Los inversores consultados coinciden en que la OPEP, que suple más de una tercera parte del crudo del mundo, no pueden hacer nada para controlar a los precios que están en su mayor nivel, en términos reales, desde 1980, el año de la revolución de Irán.
Los consumidores desean un mayor acceso al petróleo y al gas en el Oriente Medio, Rusia y Africa.
Ambos critican a las grandes firmas petroleras por no haber logrado construir nuevas refinerías.
El encuentro en Doha reunió a ministros de 59 países y a los presidentes de las mayores compañías petroleras.