Alemania no es inmune a la crisis. Su canciller, Angela Merkel, no ha tomado las medidas suficientes para evitar, en primer lugar, una debacle de su PIB del 3,8%. Además, su mercado laboral amenaza con llegar a los 4,7 millones de parados.
Alemania no es inmune a la crisis. Su canciller, Angela Merkel, no ha tomado las medidas suficientes para evitar, en primer lugar, una debacle de su PIB del 3,8%. Además, su mercado laboral amenaza con llegar a los 4,7 millones de parados.