FRÁNCFORT (Reuters) - El líder del sindicato industrial alemán IG Metall dijo el martes que mantiene su oposición a la posible compra de la automovilística Opel por parte de su rival Fiat, tras reunirse con directivos de la firma italiana.
FIAT (F.IT)y Opel son rivales directos, en especial en el segmento de modelos medianos como el Grande Punto y el Corsa, y la repetición de diseños de vehículos similares suele llevar a despidos, algo a lo que IG Metall se opone expresamente.
"No puedes eliminar ninguna preocupación dado que es objetivo, así que ése es uno de los problemas", sostuvo Berthold Huber en una rueda de prensa en la sede del sindicato en Fráncfort, añadiendo que las diferencias en la cultura de las dos empresas hacen aún más difícil una adquisición.
Aunque el consejero delegado de Fiat, Sergio Marchionne, dijo comprender cuáles son los temas importantes para IG Metall, como el sistema alemán de administración laboral conjunta, el líder del sindicato señaló que también estaría dispuesto a hablar con otros posibles inversores.
El sindicato de Opel, que está en negociaciones por despidos y reducción de costes de salarios fijos por 1.200 millones de dólares (unos 891 millones de euros), ha criticado desde un principio los planes de compra de Fiat y sus previsiones para el cierre de plantas.
También alertó que el acuerdo sería financiado por los contribuyentes de Alemania, que pagarían de manera indirecta los planes de Marchionne de reducir la sobrecapacidad de la empresa, que según los líderes laborales se duplicaría de cerrarse el acuerdo.
