El que fuera presidente de Merrill Lynch, John Thain, ha acusado a Bank of America de mentir acerca que su implicación en los polémicos bonus pagados a los directivos de Merrill, así como de las grandes pérdidas registradas por la entidad que comandaba. Según afirma en una entrevista concedida al diario estadounidense The Wall Street Journal, Keneth Lewis estaba al corriente de todo.
"La teoría de que Bank of America no tenía una relación considerable con este proceso y de que yo fui el único que tomó esas decisiones es simplemente falso", señala Thain al The Wall Street Journal.
El ex presidente de Merrill abandonó la entidad el pasado mes de enero envuelto en la polémica. Poco después de que se materializase la fusión con Bank of America, se conoció que varios altos ejecutivos de Merrill habían recibido cuantiosos pagos en concepto de primas. En concreto, se pagaron en secreto bonificaciones por 3.600 millones de dólares mientras que esa entidad se beneficiaba de ayudas públicas.
Días más tarde, Merrill anunció unas pérdidas correspondientes al cuarto trimestre de 2008 de 15.310 millones de dólares.
Directivos en tela de juicio
En varias ocasiones, Bank of America responsabilizó de todo lo ocurrido a Thain, lo que ha ensuciado severamente su reputación. Sin embargo, el ex presidente de Merrill asegura que acordó con el consejero delegado de Bank of America, Kenneth Lewis, distribuir dichos bonus antes de cerrar la compra de Merrill.
El propio Lewis está en el ojo del huracán desde que BoA anunciase la compra de Merrill Lynch el pasado mes de septiembre por 50.000 millones de dólares y ha sido duramente criticado por algunos accionistas por su política de compras. De hecho, la pasada semana la prensa estadounidense apuntaba la posibilidad de que su cargo será puesto a examen en la próxima reunión de accionistas de la entidad.
Por otra parte, desde el banco de Lewis no han querido comentar las declaraciones de Thain. Según ha comunicado el portavoz de Bank of America, Robert Stickler, al Journal, la entidad se mantiene firme en lo dicho hasta ahora y considera que es momento de pasar página. Stickler concluye deseando "lo mejor en sus proyectos futuros" al ex presidente de Merrill.