Bueno, sí, puede ser una buena época para iniciar un negocio. Y pensamos al menos en cuatro razones convincentes para ello. Pero sólo si el negocio que espera iniciar pasa un examen de envergadura: esto es, si puede vender más por menos. Para ser claros, no queremos decir un poco más por un poco menos. En esta época de recesión, una nueva empresa no tiene muchas posibilidades a menos que ofrezca una propuesta de valor que es muy superior a las actuales ofertas del mercado.
Seguro que, hasta no hace mucho usted podía enfrentarse a un competidor en materia de servicios o productos, añadiendo un nuevo atributo o dos, y persuadir a los clientes que lo compraran a un precio mayor. Pero, en la actualidad, los días de vender marginalmente a más precio han desaparecido. Y tal vez pase algún tiempo antes de que retornen.
Tras esa advertencia, le podemos decir que si usted es un empresario que ofrece un producto o un servicio que mejorará de manera significativa la vida de muchas personas, y a un costo mucho más bajo que el de la competencia, he aquí las razones por las cuales debe tomar la delantera.
En primer lugar, si existe una cosa que una nueva empresa necesita para salir rápido de la línea de partida y competir de manera eficaz con empresarios bien establecidos es personas inteligentes, deseosas de ganar. Y esas personas están ahora más disponibles que en cualquier época de los últimos años. Ahora, obviamente, echar empleados es una cosa muy terrible. Y hay millones de dolorosas historias detrás de la actual tasa nacional de desocupación del 8,1 por ciento.
Pero lo cierto es que nuevas empresas viven o mueren dependiendo de la rapidez con que pueden contratar a empleados hambrientos, brillantes y flexibles. En el actual clima de negocios, en el cual hay tal falta de empleos profesionales con experiencia y procedentes de Escuelas de Administración de Empresas, están ansiosos por ponerse a trabajar. Y eso facilita el proceso.
Todos somos mortales
La segunda razón está vinculada con la primera, aunque tiene que ver con algo más efímero: el apremio general y la falta de arrogancia que sienten en estos días la mayor parte de las personas. Algunos ex amos del universo han descubierto que son simples mortales. Y personas que creían que todo dependía de ellas comienzan a descubrir que si sus compañías no triunfan, ellas tampoco. Por lo tanto, no sólo el actual clima ha facilitado la contratación de buenos empleados, sino que también ha alentado entre los empleados una nueva comprensión sobre la importancia del verdadero trabajo en equipo, y de una productividad constante. Esas buenas vibraciones son la esperanza de cada gerente y el sueño de cada empresario.
La tercera razón está relacionada con el dinero, pero en una buena manera. Pese a las noticias sobre la dificultad para obtener créditos, existe financiación para nuevas empresas, especialmente para aquellos que han pasado la prueba del más por menos de la cual hablamos antes. No estamos sugiriendo, por supuesto, que los empresarios de la actualidad pueden esperar las condiciones de cuentos de hadas del pasado, cuando el dinero parecía crecer en los árboles. Pero muchos bancos regionales están ansiosos por prestar, y las firmas de capital riesgo siempre están buscando nuevas ideas para inversiones. Después de todo, las nuevas empresas son una parte vital de esos negocios.
Buen momento
Finalmente, comenzar un negocio ahora lo ubicará muy bien a la hora de disfrutar de la eventual recuperación económica. Sólo piense en esto: si usted comienza su empresa ahora, tendrá un personal de empleados inteligentes, llenos de energía, que han aprendido cómo trabajar juntos para mantener los precios bajos y la innovación alta.
Su empresa no acarreará costos de legado, o soportará las cicatrices de despidos y la baja moral que los acompaña. En otras palabras, usted estará en condiciones de capturar la ola más temprana de recuperación, y podrá avanzar hacia el siguiente nivel. Eso es algo que causa entusiasmo.
En este momento, el mundo necesita miles de empresarios que formulen esta pregunta. Esperemos que descubran que tal vez no exista un tiempo como el presente para comenzar a partir de cero.
