El caso que investiga la relación entre Iberdrola y Cenyt, la sociedad que gestionaba el excomisario de Policía José Manuel Villarejo, vuelve a dar otro giro. La Audiencia Nacional ha desestimado el recurso de Iberdrola contra la decisión del juzgado instructor que pedía archivar la causa contra José Antonio del Olmo, considerado como pieza clave en la investigación, por presunta falsedad documental. En un auto fechado el 12 de noviembre, se desestima el recurso de la compañía al considerar que los hechos del auto emitido por el juzgado de Instrucción Número 6, en el que Iberdrola aparece como investigada, contiene la motivación o fundamentación suficiente.
A esto se suma, la negativa en otro auto del escrito presentado por el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, en el que pidió que se pusiese que él no formaba parte del órgano de gobierno de Renovables cuando se encargó el proyecto Wind a Villarejo.
En su escrito, Sánchez Galán solicitaba la rectificación de dos cuestiones que aparecían en el auto de 9 de julio en relación con el exdirectivo de esta compañía, José Antonio del Olmo Ruiz, y que se trataban, según aquel, de errores materiales.
Iberdrola se querelló contra Del Olmo por un presunto delito de falsedad en documento privado. La compañía alegaba que el informe que el exdirectivo eleboró sobre la cuenta de facturas anómalas emitidas por la Dirección de Seguridad Corporativa del 1 de diciembre de 2004, no era más que "un conjunto de documentos que se querían emplear para perjudicar a la compañía".
Con todo, el pasado mes de julio el juez García-Castellón, encargado de este caso, admitió dichos documentos e imputó a Iberdrola Renovables por un presunto delito de cohecho. El magistrado señaló entonces que la filial habría contratado a Villarejo a finales de 2011 a través del entonces director de Seguridad de Iberdrola, Antonio Asenjo, para investigar a la empresa suiza Eólica Dobrogea, a su accionista mayoritario Chrisopher Kaap y a su apoderado Corneliu Dica.
El escrito dice que la filial se habría aliado con la eólica para desarrollar una serie de proyectos en Rumanía, pero con el tiempo surgieron conflictos que se acabaron resolviendo de forma favorable a la eléctrica española en un procedimiento arbitral.
La Sala piensa que los pronunciamientos de García-Castellón son "prematuros"
Estos hechos serían imputables a empleados y directivos de Iberdrola Renovables, decía el juez, recordando que en el momento en el que se habría contratado y ejecutado Wind, el presidente de Iberdrola, y en concreto de Iberdrola Renovables, era Ignacio Sánchez Galán, mientras que el director general de Negocios era José Luis San Pedro, ambos investigados.
La Sala piensa que esos pronunciamientos de García-Castellón son "prematuros", y pide al magistrado determinar si el documento "manipulado" por Del Olmo resulta necesario para la investigación por separado o sirve para corroborar las declaraciones que, como testigo, pudiese efectuar el exdirectivo sobre los hechos que se investigan.