
La manida crisis ha dado una vuelta de tuerca más a los seguros de automóvil, la rama del negocio en la que en España existe una mayor competencia. La actual coyuntura ha traído consigo una nueva lucha de precios entre las compañías aseguradoras de coches, que en la práctica viven una guerra de ofertas desde principios de siglo.
La estrategia que están desarrollando las empresas en este ámbito parte de una base tan sencilla como evidente. Si la venta de coches se ha hundido hasta registros históricos -hasta 453.659 vehículos menos durante 2008 en relación al año anterior-, la distribución de los seguros que cubren a estos vehículos tiene por fuerza que reducirse.
La nueva estrategia
A partir de ahí, como el mercado nuevo es casi inexistente, sólo queda un camino para crecer: tratar de robarle a los competidores los clientes que ya tiene. ¿Cómo? Obviamente, con ofertas atractivas. Y eso incluye tanto mejores precios -el factor determinante para la mayor parte de los usuarios- como una ampliación de servicios, que pueden llegar en algunos casos hasta a tener carácter gratuito.
Sin embargo, las empresas aseguradoras tratan, además, de no descuidarse en esta vorágine y, como consecuencia, la otra gran apuesta es, en estos delicados momentos, la retención de la propia cartera.
Asimismo, esta táctica encaja en un mercado que busca cualquier vía para recortar gastos, dado el estado macroeconómico internacional y, sobre todo, las elevadas tasas españolas de paro. Según fuentes del sector consultadas por elEconomista, "las campañas que se realizan surten ahora mayor efecto en un cliente que está deseoso de rebajar la cuota que paga, y así poder destinar ese ahorro a otras necesidades".
Clientes receptivos
Ante tal panorama la sucesión de ofertas no se ha hecho esperar. La primera en romper el hielo fue Mutua Madrileña, que, con un impresionante despliegue, decidió revertir más de 600 millones de euros sobre sus mutualistas durante los próximos tres años.
En concreto, la rebaja afectará al 75% de los asegurados en automóviles -el negocio puntero de Mutua-, es decir, a 1,3 millones de personas. Este colectivo se ahorrará de media un 6%, aunque en algunos casos esta bajada podría llegar hasta el 40%. Los descuentos se aplicarán en función del historial de cada cliente: cuanto mejor sea éste, mayor será el recorte de precio.
Mientras, el líder en el segmento de los automóviles, la aseguradora Mapfre, tampoco ha perdido el tiempo, puesto que ha decidido recortar un 4% el importe de las pólizas que cobra a sus clientes.
Batería de medidas de LDA
Línea Directa Aseguradora (LDA) ha lanzado un servicio gratuito de gestión de reparación de vehículos. Más de un millón y medio de clientes podrán beneficiarse, así como aquellos que acudan recomendados por éstos y trabajen con otra aseguradora.
Además, la aseguradora del teléfono rojo ofrece descuentos de 100 euros a los vehículos de empresa; tarifa plana para las motos de campo y los scooters; y, finalmente, la opción de pagar la póliza de forma mensual.
En último lugar, Génesis y Click-Seguros ofertan descuentos que pueden alcanzar el 50 y el 60%, respectivamente, pero se circunscriben sólo a condiciones muy favorables, cuando por ejemplo el usuario que desee cambiarse de compañía no haya pasado ningún parte en un periodo mínimo de cinco años.
Arrastrados por la baja producción de vehículos
Fuente: ICEA / elEconomista