Barcelona, 20 nov (EFECOM).- El secretario general de ERC, Joan Puigcercós, planea resucitar el proyecto de operador público de telecomunicaciones de la Generalitat cuando asuma su nuevo cargo como conseller de Gobernación, han avanzado a EFE fuentes del sector.
Este proyecto, que había sido una de los planes estrella del antiguo tripartito catalán, había topado con la oposición del que será nuevo presidente de la Generalitat, José Montilla, quien primero como ministro de Industria lo calificó de "sobrepasado" y luego ya como candidato dijo que no tenía ninguna intención de impulsarlo.
El plan de ERC es volver a plantear que la Generalitat compre a Frace Telecom el 75% del operador Al-pi, donde la administración ya cuenta con el 25%, y dar un giro estratégico a esta firma para que ofrezca servicios a las empresas de telecomunicaciones alquilando red de fibra óptica.
Esto se haría a través de un Ente Gestor de Infraestructuras de Telecomunicaciones, que controlaría Al-pi, y se pondrá un especial énfasis en no hablar de "operador neutro", para no herir sensibilidades entre los socialistas que se han opuesto al proyecto.
Con el nuevo reparto de carteras, Puigcercós ha conseguido que toda el área de telecomunicaciones vuelva a depender de ERC, incluyendo el Centro de Telecomunicaciones, Sociedad de la Información y el proyecto Administración Abierta, un proyecto para potenciar las relaciones del ciudadano con la Generalitat y otras administraciones a través de internet.
Para ello, creará una nueva secretaria general de Sociedad de la Información, frente a la que nombrará a Jordi Bosch, quien ya ocupó la dirección del Centro de Telecomunicaciones, apuntan las mismas fuentes.
Puigcercós no se ha declarado públicamente a favor del proyecto, pero el pasado sábado en el Encuentro Económico en S'Agaró (Girona) ya declaró que las prioridades del nuevo tripartito serán "la fibra óptica, la formación y el ferrocarril, tres claves que nos permitirán ser competitivos en el mundo industrial".
La Generalitat tenía el plan de invertir 233 millones de euros en los próximos años en una red de fibra óptica que sería administrada por un operador público que facilitaría el acceso a la red a terceros, para que pudieran ofrecer servicios de banda ancha en aquellos lugares en de Cataluña en los que dichos servicios sólo los da Telefónica.
Ahora ERC piensa retomar este proyecto que además estaba en el programa de los republicanos, siendo esta formación la única que defendía mantenerlo.
La venta del 25% de Al-pi a France Telecom se paralizó antes de las elecciones con un pacto tácito al que habían llegado CiU y PSC y que suponía dejar este tema fuera del debate electoral y que fuera el futuro gobierno el que decidiese su futuro accionarial. EFECOM
ml/mg/jj