
El presupuesto de 1.200 millones de euros del Plan VIVE, puesto en marcha por el Gobierno para fomentar la renovación del parque automovilístico español, podría agotarse en julio, un año antes de lo previsto. Según ha informado hoy el ministro de Industria, Miguel Sebastián, en las dos primeras semanas de febrero se contabilizaron 5.283 operaciones y un total de 14.319 operaciones hasta mediados de este mes.
Tras reunirse con el director de la planta de PSA en Vigo, Pierre Ianni, Sebastián afirmó que desde el 19 de enero hasta la fecha 11.444 personas se acogieron al plan, lo que está "muy por encima del ritmo esperado de 5.000 operaciones al mes".
El ministro destacó que el Plan VIVE está empezando a funcionar "por encima de las expectativas", ya que durante el último mes se acogieron a este programa más del doble de las operaciones previstas.
Sin embargo, incidió en que de mantenerse este ritmo de crecimiento la dotación presupuestaria destinada al plan, 1.200 millones de euros, se acabará en julio de este año, mientras que la fecha prevista para el final del plan es julio de 2010. Por ello, animó a los consumidores a beneficiarse del mismo "lo antes posible".
5.283 operaciones en febrero
Según los datos publicados por Industria, durante las dos primeras semanas del presente mes se acogieron a este Plan 5.283 operaciones, lo que representa aproximadamente el 20% de los automóviles matriculados en España en esa quincena.
Desde el Ministerio señalaron que estos datos "confirman la buena aceptación entre quienes desean adquirir un coche" que ha tenido el plan tras las modificaciones introducidas por el Gobierno el pasado mes de noviembre.
Por Comunidades Autónomas, Andalucía fue la que más operaciones del VIVE registró, 2.381, seguida de Cataluña, con 1.741 operaciones, de Madrid, con 1.516, de Galicia, con 1.418, y de Castilla y León, donde 1.266 personas que se acogieron a esta iniciativa.
El Plan VIVE facilita financiación para sustituir vehículos de más de diez años de antigüedad o de más de 250 kilómetros por automóviles nuevos o usados con una antigüedad inferior a cinco años. A través del programa, se conceden préstamos sin intereses para los primeros 10.000 euros destinados a financiar coches con un precio no superior a 30.000 euros, mientras el plazo de amortización se sitúa en cinco años, incluido uno de carencia de principal.