Logroño, 10 nov (EFECOM).- La Comisión de Agricultura de la UE sostiene que el arranque de las 400.000 hectáreas de viñedo propuesto en el primer borrador para la reforma de la OCM del Vino "no es una decisión firme" y considera que existirá la posibilidad de sustituir esta práctica por la reestructuración y reconversión.
En este sentido se pronunció hoy el representante de la Dirección General de Agricultura de la UE, Alberto D'Avino, en su intervención dentro del seminario "El sector vitivinícola como motor de desarrollo rural", que se celebra en Logroño y en el que se analizó la reforma de la OCM del Vino.
D'Avino, quien intervino en la mesa redonda titulada "La reforma de la Organización Común de Mercado del Vino en un contexto de globalización", aseguró que "la propuesta de la Comisión de Agricultura es un documento de reflexión, que va mucho más allá del arranque de las 400.000 hectáreas" propuesto en el primer borrador.
Aseguró que la Comisión es consciente del rechazo de una gran parte de Estados al arranque y recalcó que el objetivo de esta reforma es "crear un sector vitivinícola europeo competitivo".
Para ello, dijo, también se plantea la posibilidad de seguir adelante con el programa de reconversión y reestructuración como mecanismos de mejora de la producción.
Explicó que la Comisión ha invitado a todas las partes -administraciones y organismos del sector- a "un amplio debate"; es consciente de la necesidad expresada por todos los Estados de que esta reforma es necesaria y también de que alguna de sus propuestas -entre ellas el arranque- no han sido aceptadas.
Puntualizó que no existe un calendario preciso sobre las propuestas de la Comisión, cuya titular, Mariann Fischer Boel, espera que este órgano apruebe las propuestas legislativas planteadas por el Parlamento Europeo en la primera mitad de 2007".
La Comisión, añadió, considera que el sector del vino es "muy competitivo y muy exportador, pero presenta enormes desequilibrios entre la oferta y la demanda y requiere de medidas drásticas que eviten que esta situación se agrave aún más".
También destacó la pérdida de cuota de mercado del sector europeo como consecuencia de la creciente implantación en Europa de vinos de los países del Nuevo Mundo -Chile, Nueva Zelanda o Australia-, así como el "inexorable" descenso en el consumo del vino en Europa en las últimas décadas.
D'avino calificó de "muy preocupante" esta caída en el consumo del vino, sobre todo, en un contexto en el que las exportaciones "se han estancado en los últimos años frente al incremento de las importaciones de países terceros".
Recalcó que son objetivos de esta reforma conseguir un mayor equilibrio del mercado, aumentar la competitividad y preservar los valores tradicionales vinculados a la cultura del vino. EFECOM
pmg/alg/jlm