
La petrolera buscará socios para las inversiones de los grandes pozos de Talisman.
Repsol avanza en el plan de desinversiones de activos que llevará a cabo tras la compra de Talisman Energy. La intención de la petrolera es ingresar cerca de 1.000 millones de euros, el 2 por ciento del total de los activos.
Según explicó el presidente de Repsol, Antonio Brufau, y el consejero delegado, Josu Jon Imaz, la intención de la compañía es vender activos relacionados con las infraestructuras y la logística ante la caída de los precios del petróleo y buscar alianzas en los activos que supongan un mayor desembolso para poder acotar la inversión en exploración y mejorar los ingresos por barril. Para ello, Repsol está dispuesta a buscar socios que participen en los desarrollos que supongan una mayor inversión de capital y entre ellos está barajando el proyecto de Duvernay, un yacimiento de gas en Estados Unidos que está pendiente de desarrollar y que generó airadas negociaciones durante la compra por la valoración del activo.
La petrolera estaba dispuesta a desprenderse de los pozos que tiene en el Mar del Norte, concretamente en Reino Unido, donde la producción está en declino, al igual que los de Noruega, pero por el momento Repsol apostará por la prudencia y está poniendo en marcha un plan de saneamiento de TSUK y revisará las opciones de cierre de pozos y de inversiones en los pozos en los que se pueda revertir esta situación.
Entre las opciones de desinversiones que están sobre la mesa, aunque todavía no están cerradas, tal y como explicó Imaz, están las opciones que tenía ya analizadas la propia Talisman y que incluyen los activos de midstream de Marcellus, así como los pozos de Kurdistán (Kudamir y Topkhana).
Reuniones en Canada
Los principales ejecutivos de la petrolera han iniciado un road show para convencer a las autoridades de las bondades de la operación antes de la junta de Talisman del próximo 18 de febrero. El presidente de Repsol, Antonio Brufau, ha mantenido un encuentro los pasados lunes y martes en Ottawa con el ministro de Industria, James Moore, y con el de Finanzas, Joe Oliver, para buscar el permiso de la Canadian Investment Act. La legislación del país obliga a demostrar las bondades de la operación para el país antes de lograr su aprobación y, en opinión de Brufau, la colaboración con las autoridades está siendo muy buena. El presidente de Repsol también se trasladó a Edmonton para reunirse con el Premier de Alberta, Jim Prentice.
Del mismo modo, el consejero delegado, Josu Jon Imaz, y el director de exploración, Luis Cabra, también han visitado a representantes de Sonatrach para explicarles el aumento de su posición en el país con la compra de Talisman, que incrementa su presencia en este país y en Colombia, como zonas donde ya operaba la española.
Talisman ademas está generando importantes sorpresas positivas para la compañía, ya que tenía firmadas coberturas de venta de petróleo a 75 dólares y la caída de precios del crudo la notará en menor medida durante este año.
Producción estimada
Repsol y Talisman cerrarán este año con una producción estimada de entre 680.000 y 729.000 barriles equivalentes de petróleo y con un incremento de las reservas del 55 por ciento por esta operación de compra. Tras la adquisición, Repsol tendrá presencia en más de 50 países y contará con más de 27.000 empleados.
La petrolera tendrá un capital empleado de 46.000 millones de euros (58 por ciento exploración y producción, 30 por ciento refino y marketing y 12 por ciento Gas Natural Fenosa). Asimismo, de los 30.000 millones de dólares (26.500 millones de euros) que supone el negocio de exploración, la mitad estará en Norteamérica, el 22 por ciento en Latinoamérica y Repsol vuelve a ganar peso en el Sudeste asiático, que ya representa el 14 por ciento y Europa el 10 por ciento.
La compra de Talisman permitirá incorporar nuevas áreas clave en tres activos principales: Greater Edson, Chavin y Duvernay, en Canadá y presencia en Marcellus y Eagle Ford, dos de los mayores yacimientos no convencionales en Estados Unidos.