Emprendedores-Innova

Iker Marcaide: "Para tener emprendedores se debe cambiar el sistema educativo"

  • "Hemos perdido personas que no encajaban con el modelo educativo"
  • "Debería existir una forma de que las startups retribuyan con acciones"
Iker Marcaide, emprendedor e inversor. Imagen de Bankia

"Prácticamente desde cualquier parte de España se pueden hacer cosas interesantes". Así piensa Iker Marcaide, emprendedor e inversor que, desde que montase su primera compañía en 2009, no ha dejado de apoyar a este ecosistema en creciente expansión.

Marcaide, que cree en la educación individualizada y en la importancia del aprendizaje fuera de las aulas, abrió el año pasado un colegio para niños de entre tres y 18 años en Valencia. "Debemos buscarnos la vida, aprender, ser independientes y disfrutar", explica, una filosofía que traslada a este nuevo centro educativo.

¿Cómo se inicia en el mundo del emprendimiento?

Tras estudiar Ingeniería Industrial en Valencia, en 2008 fui a EEUU a estudiar un MBA. Me di cuenta de que los malos tipos de cambio y las comisiones costaban mucho dinero. Así, se me ocurrió crear una alternativa a las operaciones bancarias internacionales y nació peerTransfer -lo que ahora es Flywire-. Esta solución simplifica los pagos a nivel internacional y, hoy, es usada por más de 1.000 universidades en todo el mundo y cientos de miles de estudiantes cada año. Lideré esta compañía hasta 2013, y desde 2014 estoy ocupado con Zubilabs.

¿Qué labor desempeñan?

El nombre viene de La Zubia, un pueblo de Granada en el que me crié. Nos dedicamos a cofundar empresas que mejoran el mundo: miramos la sostenibilidad financiera, pero también la parte social o medioambiental. Los temas que nos interesan van desde la educación hasta la salud, pasando por los colectivos desfavorecidos, etc.

El año pasado abrieron un colegio en Valencia...

Sí, hemos cofundado un centro escolar para niños entre tres y 18 años, centrado en un aprendizaje personalizado, el Imagine Montessori School.

¿Cómo nació este proyecto?

Cuando buscaba colegio para mi hijo, me llamó la atención el hecho de que se siga enseñando de la misma forma en la que yo aprendí. Un poco decepcionado, empecé a indagar y vi que en EEUU y en los países nórdicos, el aprendizaje era guiado según los intereses de cada niño, a nivel individual. Esto es Montessori, un modelo que tiene muchos años, pero que está poco desarrollado en España y cuya pedagogía nosotros hemos actualizado.

¿De qué modo afecta la educación que recibimos al emprendimiento español?

Ahora, las personas que terminan su carrera no saben qué deben hacer. Es curioso que se hagan esa pregunta en ese momento, porque se supone que, cuando eres más joven, a base de viviencias, debes determinar qué es lo que te motiva. Es complicado decir a un chaval de 18 años que debe ser proactivo, cuando lleva toda la vida escuchando órdenes sobre lo que tiene que hacer. Seguramente muchos talentos se han perdido porque no han encajado con el sistema educativo establecido. Si queremos emprendedores y gente con iniciativa, tenemos que empezar desde muy pequeños.

¿Qué cambios se necesitan todavía en nuestro país para impulsar esta actividad?

Antes pensaba que al emprendedor le faltaba ambición, pero cada día me convenzo más de que esto no tiene tanto peso. Hoy en día, el apoyo de las administraciones empieza a ser clave. Sin embargo, creo que no hay una fórmula buena en España para que las startups retribuyan con acciones a sus empleados, un concepto que en España es negativo. Como empresa emergente, no se pueden permitir pagar al nivel de los salarios del mercado.

WhatsAppFacebookTwitterLinkedinBeloudBluesky