Hoy en día, las nuevas tecnologías constituyen un canal de negocio importante para las compañías. En el caso de aquellas que se inician en este mundo, es fundamental seguir algunos pasos básicos para comenzar a dar a conocer y promocionar sus productos y servicios.
1. Plan de marketing
En primer lugar, la estrategia social media debe estar en línea con los objetivos del plan de marketing online empresarial. Y después, para saber en qué redes sociales debe tener perfil corporativo la compañía, lo primero es conocer el público objetivo al que se va a dirigir.
2. Elegir la red adecuada
Dependiendo del tipo de cliente, una red social se adecuará mejor que otra. Si la empresa necesita un gran alcance, lo ideal es Facebook, pero si lo que precisa es generar conversación, es mejor aprovechar la inmediatez que caracteriza a Twitter. Si el producto es algo visual, redes como Instagram o Pinterest son las mejores opciones, y si lo que quiere es relacionarse con empresas, conviene estar en LinkedIn.
3. Actualizar contenidos
Una vez seleccionadas las plataformas sociales es importante actualizar los contenidos que se vierten en ellas. Existen algunas herramientas que ayudan a organizarlos. Así, por ejemplo, Hootsuite permite gestionar redes como Facebook, Twitter, LinkedIn, Google+, Instagram, YouTube o Foursquare a través de una organización colaborativa.
4. Etiquetas
Muchas de estas nuevas tecnologías permiten añadir etiquetas para marcar palabras clave o temas específicos. De esta manera, se pueden crear hashtags propios o aprovecharse de los más populares para generar opiniones y darse a conocer a un público mucho más amplio.
5. Contenido visual
El contenido visual en las plataformas online tiene un mayor impacto y efecto en las audiencias sociales. Según datos de KISSmetrics, los mensajes con fotos reciben un 53% más de Me gustas, un 104% más de comentarios y un 84% más de clics que los mensajes de texto.
6. Lenguaje apropiado
A diferencia de lo que ocurre con los usuarios particulares de las redes sociales, las empresas deben mantener un lenguaje apropiado a su público, pero no por ello debe ser aburrido o demasiado serio. Es imprescindible comportarse de manera correcta, puesto que todo lo que se escribe y se dice en las redes sociales queda grabado. Otro aspecto importante es no usar estos medios como panfleto empresarial.
7. Interactuar
Interactuar con los usuarios y potenciales clientes es imprescindible. En este sentido, existen redes sociales, como Facebook y Twitter, que lo permiten de una manera más sencilla que otras. De esta forma, para dar a conocer un concurso o un evento, las plataformas sociales son los mejores canales.
8. Centrarse en el cliente
El cliente debe ser el centro de atención de la organización. Tener usuarios insatisfechos en las plataformas sociales puede acabar perjudicando la imagen de la propia empresa. Un aspecto importante es escuchar sus quejas, dudas, ruegos y sugerencias para saber qué les preocupa o qué quieren, pero también para conocer en qué punto está fallando l a compañía y corregir los errores.
9. Anuncios
Facebook, Twitter y LinkedIn proporcionan una variedad de formatos de anuncios y herramientas. Así, Twitter ofrece una plataforma de autoservicio de publicidad para empresas de todos los tamaños a través de Twitter Ads, desde donde promocionar cuentas, tweets o tendencias del momento.
10. Evaluación y análisis
Existen multitud de herramientas para evaluar el resultado de los contenidos de una empresa en las redes. Una de ellas es SocialBro, que ofrece un rango útil para medir el rendimiento y el compromiso de los esfuerzos, aunque este se limita a Twitter, Klout y Visual.ly son otro de los ejemplos. La combinación de estas herramientas permite crear informes sobre los aspectos del plan de marketing.