Emprendedores-Innova

La pyme española acude a las plataformas 'fintech', la nueva tendencia de financiación

  • Ofrecen mayor flexibilidad a las empresas que necesitan crédito

Si la tecnología ha traído cambios en todos los ámbitos de la empresa, esta transformación ha sido más evidente aún en todo lo relacionado con el sector financiero. Además, aunque para las grandes empresas esta transición hacia el mundo digital está siendo más sencilla, para las pymes estos procesos son un poco más complicados. Más noticias en la revista gratuita elEconomista Gestión y Desarrollo Exterior

Así, las pequeñas y medianas empresas y los autónomos españoles todavía no están acostumbradas a la utilización de plataformas de financiación online. Frente a estos, los nuevos emprendedores, muchos de ellos pertenencientes ya a la generación millennial, ven cómo sus empresas surgen en un contexto embebido de las nuevas tendencias en este sector.

Todas estas herramientas financieras se aglutinan dentro del concepto de fintech, que surge de la unión de las palabras en inglés financial y technology y que hace referencia a las empresas que se sirven de las últimas tecnologías para ofrecer servicios financieros innovadores. Así, existen muchas compañías en Internet que cubren los distintos aspectos de este sector, desde pagos y transacciones hasta financiación colectiva, pasando por la banca online.

Países anglosajones

El fintech tiene su máxima expansión en los países anglosajones, donde el emprendimiento y la iniciativa inversora privada tienen más peso que en España o el resto de Europa. Sin embargo, todo parece apuntar a que el sector no ha hecho más que arrancar en nuestro país, a juzgar por la evolución que éste ha tenido. Así, en un momento en el que el grifo del crédito bancario estaba completamente cerrado, estas iniciativas se postularon como la solución perfecta a los problemas financieros de las pymes.

Frente a la rigidez de los productos que ofrecen los bancos tradicionales -en cuanto a requisitos para convertirse en solicitante, historial crediticio, límite mínimo y máximo de cantidades e, incluso, obligación de contratar otros servicios para acceder al deseado- , estas plataformas llevan la flexibilidad por bandera. "En cuestión de horas, las empresas pueden registrarse en nuestra plataforma y obtener la financiación que están buscando", explica Paulino de Evan, consejero delegado y cofundador de Finanzarel, iniciativa especializada en el anticipo de facturas y pagarés (invoice trading), "algo similar a eBay, donde puedes vender tus facturas pendientes de cobro".

Abaratan el coste

Otra de las ventajas que ofrece el fintech está relacionada con el precio del crédito. Así, la desintermediación que estas plataformas suponen abarata el coste de solicitar liquidez. Tal y como explica Eloi Noya, director de créditos y riesgo de LoanBook, "proponemos, en esencia, una práctica financiera más transparente y, por lo tanto, más sostenible, en la que los costes de financiación se fijan de manera objetiva, en base a la oferta y la demanda que suscita cada operación". Concretamente, esta empresa catalana trabaja con clientes sólidos -con facturaciones de entre medio millón y 10 millones de euros y más de tres años de actividad- a los que les ofrece préstamos de circulante, líneas de crédito y descuentos de pagarés.

Ante este nuevo panorama, las entidades bancarias no han tenido más remedio que reaccionar, abriéndose a nuevos canales, incluyendo entre su oferta soluciones tecnológicas, adaptándose al entorno digital e incluyendo perfiles profesionales relacionados con esta transformación. De este modo, tal y como reconocía el propio BBVA en su Observatorio Economía Digital, "las startups han irrumpido en el sector financiero aprovechando la brecha existente entre las nuevas demandas de los clientes y los servicios, en ocasiones obsoletos, que ofrecen los bancos tradicionales, lastrados por el peso de su regulación, estructura y cultura corporativa".

Complemento o alternativa

En el sector del fintech las opiniones al respecto de los bancos son variadas. Desde LoanBook creen que "son las pymes las que han de decidir si recurren a nosotros como un complemento o una alternativa, de modo que en algunos casos -por ahora, mayoritarios- seremos socios y, en otros, competidores". Por su parte, Diego Bestard, director general de Spotcap en España afirma que "la visión que tenemos de futuro es la de cooperar con la banca, que va a seguir ahí. Al final, el dinero con el que operamos las fintech viene del banco y vuelve al banco".

Sin embargo, todo parece indicar que el sistema de sucursales, al menos tal y como hoy lo conocemos, sufrirá grandes transformaciones. En este sentido, Bestard cree que "la generación millennial no pasa por el banco, prefiere las soluciones tecnológicas". Una necesidad de cambio con la que está de acuerdo Antonio Rami, cofundador de la plataforma de cambio de divisas Kantox, quien opina que "el sector financiero necesita aire fresco".

Sello de confianza

Además, el pasado mes de abril se lanzó la Asociación Española de Fintech para, en palabras de Noya, "erigirnos en un sello de confianza y seguridad para los usuarios de estas empresas" y cuyo principal reto es "explicar de forma pedagógica las características y ventajas de modelos que no resultan todavía familiares a nuestros clientes", según afirma el cofundador de LoanBook.

En un primer momento, la iniciativa surgió de Finanzarel, Kantox, Arboribus, LoanBook, Comunitae y Deudae, y con el BBVA como socio, a las que recientemente se les ha unido Spotcap. Todavía no tienen web propia, por lo que habrá que esperar a saber más detalles de la misma, aunque Noya afirma que "ya desarrolla la actividad para la que fue creada".

Por su parte, De Evan asegura que la organización busca "colaborar con el cambio coyuntural que permitirá un sistema financiero más transparente, justo y eficaz, con diversas líneas de crédito conviviendo juntas".

Así, la importancia de diversificar las necesidades financieras es una de las principales lecciones que las pymes han aprendido de la crisis. Depender al 100% de un sólo organismo puede llegar a provocar una asfixia crediticia, fenómeno especialmente peligroso para estas empresas.

WhatsAppFacebookFacebookTwitterTwitterLinkedinLinkedinBeloudBeloudBluesky