
El presidente del PP, Mariano Rajoy, ha asegurado hoy que "un gobernante con cuajo, sincero y responsable" no echa la culpa de la situación económica actual, del crecimiento del paro y de la destrucción de puestos de trabajo a "quienes han estado en la oposición siete años". Cospedal, por su parte, ha pedido a los electores que no se dejen engañar otra vez por el PSOE.
Rajoy se ha expresado de este modo durante el acto de la plaza de toros de Toledo, en donde más de 10.000 simpatizantes del PP se han congregado para dar su respaldo a la candidata, María Dolores De Cospedal, y simbolizar lo que el líder de los populares ha denominado "vientos de cambio".
El milagro de Castilla-La Mancha
En Castilla-La Mancha, ha añadido, se obrará el próximo 22 de mayo un cambio político que, a su vez, será "el revulsivo" que necesitan los españoles para desalojar del poder al PSOE, ha remarcado.
A los socialistas, en especial a su líder, José Luis Rodríguez Zapatero, ha dirigido estas palabras: "Un gobernante con cuajo, sincero, responsable, reconoce sus errores y no echa la culpa de la situación económica actual a quienes llevan siete años en la oposición. Eso es falso e injusto".
Respondiendo a Zapatero
Llevaba Rajoy unos veinte minutos de intervención hablando de la necesidad de cambio en Castilla-La Mancha cuando ha respondido a las referencias que en las últimas fechas viene haciendo el presidente del Gobierno: si la crisis ha estallado como ha estallado, ha sido por los "excesos" del anterior Ejecutivo, el de José María Aznar.
Declaraciones como éstas, según el líder del PP, "no las puede hacer el presidente del Gobierno de un país como España".
Es un afirmación "falsa", ha proclamado Rajoy, puesto que, a su juicio, "hay una cosa que todos saben", y eso es que "cuando gobierna el PSOE sube el paro", y "cuando gobierna el Partido Popular, baja".
Ha ilustrado con datos esa consideración: el equipo de Aznar y de Rodrigo Rato dejó el desempleo en el 10 por ciento, y el equipo de Zapatero, en estos últimos años, ha elevado su tasa hasta el 21, casi la misma cifra con la que salió Felipe González del Palacio de La Moncloa.