El caso del niño y su falso viaje en globo en EEUU podría ser un montaje. Esas son las sospechas que se han disparado tras escuchar al 'travieso' Falcon Heen recordar a su padre que "habías dicho que lo hacíamos por el show" en la improvisada rueda de prensa que la familia ofreció a las puertas de su casa. En imágenes: El caso del 'Balloonboy'.
Los antecedentes familiares no ayudan a disipar estas dudas; más bien todo lo contrario: disparan la rumorología. Aficionados a las ciencias 'heterodoxas' los Heen profesan pasión por el estudio de los ovnis y lo sobre natural.
De hecho la madre del pequeño Falcon asegura que es capaz de hablar con los muertos. A ello hay que añadir que muchos de sus paisanos ya les conocen por sus experiencias televisivas. Hace no mucho tiempo protagonizaron un reality sin éxito de audiencia, pero que les valió su minuto de gloria.
Estas aficiones unidas al gusto del padre por lo meteorológico (pertenece al amplio grupo de cazatormentas que persigue borrascas y demás fenómenos por EEUU) han disparado las dudas sobre un posible montaje en el ya conocido como Balloongate (el caso del globo)
"Le vigilaré más"
El padre de Falcon Heen, el niño que tuvo en vilo a Estados Unidos al temerse que tripulaba en solitario un globo de gas, declaró que va a tener que "vigilarlo mucho", al mostrarse aliviado después de que el pequeño fuera encontrado en el desván de su casa en el estado de Colorado.
"Agradezco a todos los que participaron en la búsqueda. Ha sido terrible. Lo vamos a tener que vigilar mucho ahora", señaló Richard Heene a los periodistas en la localidad de Latimer.
El padre de Falcon explicó que perdió de vista a su hijo de seis años después de haberle sorprendido metiéndose en cajas para guardar baterías en el desván.
Le gritó que dejara de hacer eso y el muchacho aparentemente se asustó y se escondió el desván que está sobre el garaje de la casa familiar en la localidad de Fort Collins.
"Dice que se ocultó porque le grité. Lamentó haberle gritado", señaló Richard Heene mientras abrazaba al muchacho, que dio una escueta explicación a los periodistas: "Comencé a jugar con mis juguetes y me quedé dormido".
"Estaba en el desván. Me asusté cuando me gritó. Por eso me metí allí. Pensé que tenía problemas", agregó.
El incidente comenzó después de que uno de sus hermanos dijo que Falcon se había metido en el globo que Richard Heene guardaba en el patio trasero y que se soltó de sus amarras y comenzó a ascender.
Las autoridades creyeron que Falcon estaba a bordo del globo, por lo que se inició una persecución que terminó cuando éste se posó sobre un campo abierto con su cesto vacío.
"Obviamente se salió del cesto. Lo tenemos aquí", señaló el padre a los periodistas refiriéndose a su hijo menor, tras un episodio de angustia que se prolongó casi cuatro horas y que mantuvo en vilo a todo el país a través de las imágenes de la televisión.