Después de un largo año de discutir con sus clientes por la crisis del Canal de Panamá, le toca ahora a Sacyr discutir con sus bancos para refinanciar los 2.400 millones de euros que les debe, asociados a su 9,2 por ciento en Repsol, y que tiene un vencimiento final a 31 de enero de 2015. Las negociaciones han comenzado ya, aunque no será hasta la vuelta de vacaciones de verano cuando se inicien las maratonianas jornadas que despejen el futuro de la constructora. No obstante, todo apunta a que los bancos no van a poner problemas para refinanciar la deuda. Más que por el continente (Sacyr) por su contenido.
Y es que pese a la subida de los títulos, tras el acuerdo con la Autoridad del Canal de Panamá (ACP), la capitalización de la constructora es inferior a la participación que posee de Repsol. Esta participación vale un 32 por ciento más que la misma compañía. Es decir, la capitalización de Sacyr es de 1.754 millones de euros, mientras que sus acciones en la petrolera valen 2.300 millones de euros. Es la baza con la que juega su presidente, Manuel Manrique, que confía en un final que satisfaga a todos. Una de las posibilidades que se barajan es la venta de esta participación. No obstante, no parece que sea todavía el mejor momento si se tiene en cuenta que Repsol cotiza a 18,61 euros y la constructora tiene en sus cuentas los títulos a un precio medio de 19,9 euros. Otra salida podría ser una emisión de bonos convertibles con la garantía de los títulos de Repsol. La mejor noticia viene por el lado de la deuda, que se ha reducido un 23% tras las últimas desinversiones realizadas. Las cosas van saliendo, pero Manrique debe ser prudente. porque faltan años para que la construcción española salga del túnel.