Para el Partido Popular su convención vallisoletana ha sido un éxito. Y lo es si se atiende a que la ecuación del éxito es la diferencia entre expectativas y resultados.
Como entre las expectativas estaba que no se concretaría nada sobre la hoja de ruta de la bajada de impuestos, solo ha quedado el laconismo de Rajoy de que al menos ahora sí va a hacer la reforma financiera que hubiera querido y no la de cuadrar a martillazos los ingresos y los gastos subiendo más de cuarenta impuestos.
El Gobierno no quiere hablar de fechas e irá bajando impuestos a medida que mejoren las cosas. Lo que con toda seguridad implica, como viene contando elEconomista, que no se revertirá la subida de impuestos en esta legislatura.
