La tenacidad del juez Castro ha dado resultado. El magistrado ha vuelto a imputar a la Infanta Cristina en el caso Nóos por los presuntos delitos de blanqueo de capitales y fraude fiscal. Anta la desimputación de la Infanta en mayo de 2013, esta vez Casto ha dictado un auto cargado de argumentos contundentes para que la hija del Rey declare el 8 de marzo. Además, el auto pone en entredicho el papel que han jugado la Abogacía del Estado, la Fiscalía Anticorrupción y la Agencia Tributaria al intentar desvincular a la Infanta del desvío de fondos públicos y fraude fiscal. Esto evidencia el doble rasero que existe en algunas instituciones en función de la posición del interesado. Pero ya lo dijo el Rey: "La Justicia es igual para todos"... o debería serlo.