Hace un año alabábamos desde estas páginas el inteligente calendario de emisiones del Tesoro, que contribuyó a salvar el año más difícil para las emisiones de deuda pública. El panorama ha cambiado y en octubre se afrontarán con confianza vencimientos por importe de 24.000 millones. Se está cumpliendo el pronóstico del Gobierno de que igual que 2012 terminó mucho peor de lo que había empezado, 2013 va a acabar mejor de como se inició. Es evidente que se ha recuperado la confianza de los inversores. Se nota en la vuelta del dinero y en la caída de la prima de riesgo, que aun tiene que descender -todavía supera los niveles de 2010 al inicio de la crisis de deuda soberana- y despeja el horizonte para las emisiones y vencimiento del Tesoro.