Un cambio histórico está a punto de producirse en los anales de la aviación comercial española: el aeropuerto de El Prat de Barcelona aventajará al de Madrid-Barajas en número de pasajeros. El hito se producirá al término de este mes, después de que en mayo pasado el aeródromo madrileño registrase un tránsito de 3,4 millones de pasajeros y el catalán de 3,2 millones.
Las causas son claras y atribuibles al descenso de actividad experimentado por Iberia y Ryanair, y al incremento en el número de vuelos operados por Vueling. Con estos números en la mano es comprensible el interés de Aena por incrementar la ocupación de la T4, operada en exclusiva por Iberia y Oneworld, con otras aerolíneas que han demostrado capacidad para crecer.