La reunión del Gobierno con los agentes sociales no parece que vaya a tener muchas más consecuencias que la foto que se han hecho juntos. Rajoy rechazó la propuesta de UGT y CCOO de lograr un pacto nacional por el empleo, aunque estimó la posibilidad de acuerdos parciales en esta materia, en protección social y en Seguridad Social. Algo preocupante pues indica que el presidente abandona la idea de acometer las reformas necesarias y opta por acuerdos descafeinados, que darán lugar a nuevas fotos, que no servirán para arreglar la situación. Sin reformas la recuperación tardará más y alargará por mucho más tiempo la reducción del paro. El Gobierno no puede eludir su responsabilidad y desaprovechar la legislatura dando el trabajo por finalizado.