Las compañías españolas han lanzado de nuevo emisiones de deuda corporativa, tras casi seis meses en que fue imposible hacerlo por el elevado coste que suponía. Mario Draghi, con el anuncio de compra ilimitada de deuda soberana a corto de los países en apuros, abrió el pasado día 6 un periodo de estabilidad que las compañías han sabido aprovechar.
Banco Santander y Telefónica fueron los primeros en tomar la iniciativa, incluso antes de que el BCE anunciara su plan; repitieron emisión en plena bajada de la prima de riesgo y ayer se sumaron BBVA, Banesto, Iberdrola, Gas Natural, Banesto y el ICO. 9.850 millones en emisiones, que parece seguirán en los próximos días. Una muestra de la necesidad de que tregua deje de serlo y vuelva la estabilidad.