La petición de rescate por parte de la Comunidad Valenciana puede ser secundada por Andalucía, una de las ocho autonomías apercibida por Hacienda en el último Consejo de Política Fiscal y Financiera. Tras el préstamo de 500 millones concedido en junio por el ICO para cubrir sus vencimientos de deuda, el Gobierno que preside José Antonio Griñán debe hacer frente a nuevos vencimientos de 700 millones antes de que acabe el año. El político andaluz reconoce que en la práctica se encuentra intervenido, ya que sólo decide sobre 5 de cada 100 euros del presupuesto, pero pese a ello desembolsará la paga extra de julio a sus 266.000 trabajadores públicos. Griñán debe asumir la delicada situación de Andalucía y poner coto al gasto público.