"Quien rescató a los supervivientes fueron los Bomberos de Barajas", dicen
MADRID, 28 (EUROPA PRESS)
Los bomberos de AENA adscritos al aeropuerto de Barajas declararon hoy ante el juez Javier Pérez, que instruye el accidente del avión de Spanair, que tardaron tres minutos en llegar a la zona del siniestro, calificando de "perfecto" el tiempo de respuesta a la hora de actuar para realizar las primeras tareas de rescate en un área que se encontraba fuera del perímetro de movilidad previsto en los simulacros.
"Quien rescató a los supervivientes fueron los bomberos de Barajas", aseveró Miguel Angel Sánchez en los pasillos de los Juzgados de Plaza de Castilla antes de comparecer. "El tiempo de respuesta no fue bueno, sino perfecto", recalcó. El instructor citó hoy a tres bomberos que intervinieron en las operaciones de auxilio para conocer el 'modus operandi' que emplearon para acceder al lugar de la catástrofe, que se produjo sobre el arroyo de la Vega, próximo a la pista 36-L.
Los testigos se defendieron de las acusaciones sobre la supuesta tardanza en llegar al escenario del impacto, que describieron como "un infierno". "Lo que está claro es que se tardaron tres minutos. La gente actuó maravillosamente. Había ayuda en todos los sitios hasta el punto de que al final hubo medios que sobraron", manifestó Agustín Sastre, jefe de uno de los Parques de Bomberos de Barajas. "Estoy orgulloso de la actuación que hubo", recalcó Sastre, que comparó la situación que se creó con "la peor de las películas de guerra".
Los testigos explicaron que los tres Parques de Bomberos de los que dispone Barajas en diferentes puntos del aeródromo recibieron el aviso de alarma de la Torre de Control al divisar la enorme columna de humo que se produjo por el impacto. A los segundos, los controladores aéreos activaron las alarmas y pusieron en sobreaviso al personal de extinción de fuego.
"Desde el Parque de la zona norte divisamos el humo. Y nada más recibir la alarma, nos dirigimos a la zona del impacto", contó Jorge Sánchez, el jefe de dotación de este centro. Explicó que Barajas cuenta diariamente con el servicio de veintiún bomberos, con tres jefes de mando, y nueve vehículos pesados. La plantilla de bomberos asciende a 160, es decir, el doble de lo que exige Aviación civil para los aeropuertos, según especificaron. En toda España, la plantilla de bomberos de AENA alcanza los 1.500.
ALERTADOS POR LA TORRE DE CONTROL.
Tras recibir el aviso de la Torre de Control, la totalidad del personal y los equipos de extinción de fuego de Barajas se dirigieron al lugar del accidente, repartiéndose las entradas por zona oeste y sur, puesto que el viento norte impedía llegar por ese camino.
"La mayor dificultad para acceder fue el humo y las llamas", recordó Miguel Angel, quien contó que el perímetro del accidente se encontraba ardiendo debido a que el Md-82 estaba "a rebosar de combustible". "Al explotar el avión, se derramó todo el combustible y se prendió todo", narró. Los bomberos tuvieron que sortear el fuego para llegar a las víctimas.
La primera dotación que accedió por la zona oeste extinguió el fuego que rodeaba a los supervivientes. Tras ello, se lanzaron al rescate de las víctimas, atrapadas entre los amasijos del avión. Algunos de los supervivientes se encontraban esparcidos en el arroyo de la Vega, lo que dificultó el rescate. "Algunos se ahogaron en el río porque estaban entre amasijos de hierro"
Una vez que las víctimas fueron rescatadas, se dispusieron al borde de las orillas del arroyo y en un apartado de la zona boscosa para concentrarlas en una zona. Se buscaba así facilitar la tarea a los servicios de Emergencias de la Comunidad de Madrid, que entonces estaban de camino. No pudieron precisar el tiempo que tardaron.
A esta primera operación de rescate se sumó a los minutos un helicóptero del SUMMA, con un médico que ayudó a los bomberos a auxiliar a las personas atrapadas entre el fuselaje del avión. Según los Bomberos, "el primer vehículo terrestre que salió con heridas fue una UVI móvil de Barajas".
DECLARACIONES SUSPENDIDA
Estaba previsto que el juez tomase hoy declaración al presidente del Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas (Sepla) y piloto de Spanair, José María Vázquez, a instancias de la Asociación Española de Usuarios de Transporte Aéreo (Asetra), pero el abogado que los representa no acudió a la comparecencia por problemas de agenda, sin avisar de su ausencia.
A los Juzgados acudió José María Vázquez, quien tuvo que volar desde Las Palmas para la declaración. El letrado de Sepla, Javier Nart Peñalver, le aconsejó que no se pronunciara, antes de declarar, sobre si los pilotos de la aeronave siniestrada el pasado 20 de agosto recibieron presiones de la compañía para despegar, pese a no estar en condiciones para ello por las averías detectadas
El presidente del Sepla se limitó a señalar que el sindicato discrepaba antes del accidente con la Dirección de la compañía, al entender que con ella al mando "no sobreviviría comercialmente". Spanair cuenta actualmente con la misma Dirección que entonces.
Se refería a un comunicado que se difundió días antes del 20 de agosto en el que se denunciaban "continuas presiones y amenazas por parte de la Dirección para que los tripulantes y el personal de mantenimiento transgredan las normas, incluyendo vulneración de límites de actividad, violación del régimen de días libres y vacaciones, de los convenios colectivos y de la legislación vigente".