El número de sucesos por pasajeros conflictivos notificados en los aeropuertos españoles fue de 538 en 2017, incrementándose en 441 con respecto al año anterior, según los datos de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA).
La agencia estatal de seguridad aérea recuerda que los comportamientos inapropiados pueden acarrear multas de hasta 5.000 euros, sólo el año pasado la AESA sancionó a 326 personas, por un importe total de 221.325 euros.
Reino Unido es el país con mayor número de pasajeros sancionados, 196 seguido de España con 53, Alemania con 19, Irlanda con 15, Francia con 11, Polonia con 9, Bélgica y Rumanía con 3, Países Bajos, Suecia y Suiza con 2 y Finlandia, Grecia, Noruega y Rusia con 1.
El comportamiento inadecuado de los pasajeros puede provocar el desvío de una aeronave, si esto se produce el pasajero debe asumir el coste del cambio de ruta. Aparte de las multas, el desvío puede llegar a afectar a la seguridad, tanto del que lo ejerce como de los demás pasajeros.
AESA está colaborando con las autoridades de otros países, y en concreto participa en el grupo de trabajo sobre 'Pasajeros Disruptivos' de la Agencia Europea de Seguridad Aérea, para identificar y desarrollar nuevas estrategias que puedan minimizar la frecuencia de estos sucesos.