El Banco Central Chino, con una subida de tipos inesperada, y Bernanke, 'confirmando' lo esperado -que la subida de tipos norteamericana toca a su fin- revolucionan los mercados bursátiles.
Hoy ha sido un día movido en cuanto a noticias macroeconómicas se refiere. Entre el Banco Central Chino y Bernanke se han encargado en unas pocas horas de disparar el euro y el oro y de hacer bajar al petróleo.
El primero en dar noticias fue el Banco del Pueblo de China, que ejerce las funciones de banco central, subiendo los tipos de interés un 0,27%, hasta el 5,85%, según el propio organismo chino, "para evitar el sobrecalentamiento de la economía".
El mercado acogió la buena (o mala) nueva con sorpresa y pesimismo en cuanto a materias primas se refiere. China, junto a la India, es uno de los mayores importadores de materias primas. Si aumentan los tipos en el país asiático, los inversores vaticinan una caída del consumo y consecuentemente de las importaciones. Por eso cae el petróleo, que pierde un 0,75 por ciento con un precio, el barril de Brent, de 71,55 dólares.
La remontada del oro
Y por la misma razón el oro ha llegado a descender un 1,85% hasta los 627 dólares por onza. Pero con lo que no contaban, o si, los inversores del preciado metal es con las posteriores palabras de Ben Bernanke, el presidente de la Reserva Federal (Fed) estadounidense.
Bernanke hizo unas declaraciones corroborando lo que ya sabía el mercado desde hace unas semanas: los tipos norteamericanos están cerca de su techo de subidas, y podrían quedarse en un 5%, cerca del 4,75% en el que se encuentran ahora mismo. De esta forma, el dólar perdió comba en favor del euro que llegó a superar los 1,25 dólares, algo que no hacía desde septiembre de 2005.
Y con la caída del dólar llegó la remontada del oro. El metal pasó de los 627 dólares a los que llegó a cotizar a los 643, con una subida respecto a ayer de un 0,74 por ciento. Todo porque al caer el dólar muchos inversores deciden depositar su confianza en el oro.