Madrid, 21 oct (EFECOM).- El Gobierno de Corea del Sur quiere potenciar las energías alternativas como solución a su problema en recursos energéticos y ante la falta de materias primas, y por eso anima a las empresas españolas del sector a invertir en ese país.
Según destacó el director de promoción del Instituto de Comercio Exterior (ICEX), Pedro Moriyón, además de las energías alternativas, Corea del Sur ofrece otras oportunidades de inversión y comercio en sectores como el agroalimentario, industrial, el de servicios, así como el turístico.
Alvaro Hidalgo, de la Universidad de Castilla la Mancha, se refirió por su parte al material sanitario, ya que el Gobierno surcoreano aumentará su gasto en este área, así como a la maquinaria, el textil y el calzado.
Hidalgo citó incluso el mercado de la perfumería, dado que, según diversos estudios, una mujer surcoreana utiliza cerca de diecinueve cosméticos diarios.
En una jornadas sobre oportunidades de negocio e inversión para las empresas españolas en el mercado coreano, los expertos coincidieron en destacar las oportunidades de inversión española y el potencial que España tiene como "intermediario comercial" entre Corea y Latinoamérica.
El mercado surcoreano, con más de 48 millones de habitantes, también presenta una importante plataforma de expansión para las empresas españolas por el número de consumidores potenciales, así como por su proximidad a otros países asiáticos, como China y Japón.
El director general de Cooperación Internacional e Inversión del Ministerio de Industria y Comercio, Seong-Hoa Hong, subrayó el sentimiento tan afín que los coreanos sienten hacia España, a pesar de que "todavía existe un bajo intercambio económico" entre ambos países, cuyas causas se explicarían por el desconocimiento mutuo.
Uno de los principales problemas que los coreanos tienen es que carecen de recursos naturales, lo que les obliga a importar materias primas, por eso, según Moriyón, el Gobierno coreano está impulsando políticas de energías alternativas, donde España puede jugar un buen papel por su experiencia en esta materia.
España, no obstante, está aún lejos de alcanzar las cuotas de exportación deseadas en el mercado coreano, y sus ventas rondan los 400 millones de euros anuales, mientras que las importaciones ascendieron a 4.000 millones de euros el pasado año.
En cuanto a las inversiones de España en Corea, en el año 2004 alcanzaron los 5,91 millones de euros, mientras que a la inversa llegaron a 10,86 millones de euros.
Estas cifras se deben a que el país asiático, undécima potencia mundial, tiene una importante proyección exportadora en sectores como la electrónica, el motor, la construcción naval, el acero y las petroquímicas, todos ellos de gran demanda en España y con precios competitivos.
En cualquier caso, España tiene oportunidades en ese país porque las importaciones se han incrementado gracias a la política de liberalización, como señaló el embajador de la República de Corea del Sur en España, Chun-Seun Lee, lo que "favorece la entrada de inversores extranjeros en esta región asiática".
El Gobierno coreano mantiene la promoción de la inversión extranjera entre sus prioridades, gracias, entre otras cosas, al impulso de zonas francas para la instalación de empresas extranjeras y a la rebaja fiscal de cinco años para el total de la inversión. EFECOM
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