Economía

Bitcoin, Bitcoin Cash o la democracia de las criptomonedas

La guerra de intereses dentro del ecosistema Bitcoin tuvo un primer movimiento significativo el pasado 1 de agosto de 2017 con la creación de Bitcoin Cash, una nueva criptomoneda que ahora existe en paralelo con el Bitcoin de toda la vida que empezó en 2009. Pero puede haber otros. El próximo mes de noviembre podría realizarse el siguiente movimiento en forma de un nuevo hard fork (que explicamos en esta entrevista) de la cadena de bloques de Bitcoin. Bitcoin por tanto nunca nos deja descansar.

Para recabar información autorizada de todo lo que está ocurriendo, he invitado a Jaime Núñez Miller, socio consultor de servicios web en Zentank, coautor del libro 'Blockchain la revolución industrial de internet' y pionero del ecosistema Bitcoin en España.

¿Cómo ha sido posible la creación de Bitcoin Cash (BCC)? ¿Nos tenemos que tomar Bitcoin Cash en serio?

El nacimiento de Bitcoin Cash como alternativa a Bitcoin es resultado de la libre competencia y del software abierto que inspira el mundo de las criptodivisas. A diferencia del euro o del dólar, nadie está obligado a utilizar Bitcoin, es más, puedes copiar el software, hacer algunas mejoras y esperar a que alguien se interese por tu nueva moneda. Si esas mejoras y el equipo de desarrolladores son suficientemente sólidos, la nueva moneda tendrá éxito y por tanto también tendrá demanda. Esto ha pasado en infinidad de ocasiones y en la actualidad ya hay cientos de criptodivisas que se cotizan en varios mercados online, aunque Bitcoin conserva más de un 50% de todo el capital invertido.

El caso de Bitcoin Cash es algo distinto al de otras criptomonedas. Generalmente éstas suelen empezar creando desde cero su propia contabilidad (lo que llamamos blockchain o cadena de bloques). En el caso de Bitcoin Cash no ha sido así y desde el pasado 1 de agosto 2017 empezó a crear sus propios bloques o apuntes contables encima de la cadena Bitcoin. De esta forma ha creado su propia cadena manteniendo el histórico de Bitcoin. Esto quiere decir que ambas cadenas comparten las transacciones y saldos anteriores al 1 de agosto, pero a partir de esa fecha las contabilidades son distintas. En consecuencia, quienes tenían 1 bitcoin (BTC) antes del 1 de agosto, ahora tienen también 1 bitcoin cash (BCC) en esa nueva blockchain. El precio de cada una lo determinan como siempre los inversores. Bitcoin se cotiza en este momento a unos $4.000 USD y Bitcoin Cash a $500 USD.

A la pregunta de si Bitcoin Cash es una propuesta seria, yo diría que sí lo es, especialmente si lo comparamos con otras criptomonedas, pero aún tiene que demostrar que su estrategia es válida y eso lo determinarán sus diferencias técnicas con Bitcoin. Por el momento el mercado ha acogido la nueva moneda con cierta frialdad.

Esas diferencias técnicas entre una y otra se refieren sobre todo a la estrategia de crecimiento. Bitcoin apuesta por la descentralización y servir de base a otras muchas cadenas y Bitcoin Cash por aumentar el tamaño de los bloques que forman la cadena. Ambas propuestas son válidas en teoría y sólo el tiempo podrá dar la razón a una u otra. Es algo así como decidir entre plantar árboles flexibles o árboles firmes ante la llegada de un huracán, aunque probablemente ambos sobrevivan si están sanos.

¿Puedes describirnos cuales han sido esos intereses contrapuestos en la comunidad Bitcoin en los últimos dos años y qué iniciativas se han propuesto por estos grupos para resolver el problema de la escalabilidad?

Creo que todos tienen los mismos objetivos a largo plazo, pero difieren en cuanto a cuál es la mejor ruta para llegar a ellos. Efectivamente la escalabilidad o cómo afrontar el crecimiento sin perjudicar a esos objetivos es el asunto que más debate ha generado estos dos últimos años. Hay que tener en cuenta que por diseño se requiere un consenso prácticamente unánime de los usuarios para cambiar las reglas de uso. Como en este caso no ha habido acuerdo es por lo que ahora tenemos otra nueva criptomoneda.

Los partidarios de Bitcoin Cash han seguido el camino más fácil y rápido que es el de aumentar el tamaño de los bloques para dar cabida a todas las transacciones. Eso soluciona el problema de la capacidad, pero a costa de una mayor centralización de la red. En este caso, los bloques son más grandes y por tanto la cadena de bloques será más pesada y probablemente sólo las empresas se podrán permitir tener un nodo en la red. Esto hace que la red sea más vulnerable a una potencial censura institucional.

Sin embargo, la estrategia de Bitcoin ha sido mantenerse ligero y descentralizado, dando prioridad a su resistencia frente a los ataques. Con una cadena más ligera cualquier persona en su casa podrá mantener un nodo. Al mismo tiempo Bitcoin ha incorporado una tecnología llamada SegWit que optimiza la estructura de datos de las transacciones haciéndolas más ligeras, más seguras y más rápidas, lo que que facilita la creación de cadenas laterales (las llamadas sidechains) vinculadas a la cadena principal. Esas cadenas abren la posibilidad de crear servicios como los que proporciona Ethereum sobre Bitcoin. También permite empezar a usar canales de pago (transacciones offchain, o sea que no se registran en la cadena de bloques de Bitcoin) que es la base técnica para la escalabilidad de Bitcoin y probablemente también para Ethereum. De esta forma el crecimiento sigue el patrón de un árbol en donde la cadena principal sería el tronco y la mayor parte de las transacciones tendrán lugar en las ramas de ese árbol. Si una rama se rompe, no se pone en riesgo todo el árbol.

El reciente giro del gobierno Chino para controlar o prohibir las criptomonedas será una prueba de fuego para ambas estrategias. Aquí la red Bitcoin tiene cierta ventaja frente a su competidor Bitcoin Cash porque cuenta ya con varios satélites transmitiendo las transacciones y la cadena de bloques. Aunque los satélites aún no tienen cobertura en China es de esperar que ahora se dé prioridad a esa zona. Cualquier persona con un receptor de satélite similar a los de TV podrá acceder a Bitcoin saltándose así los controles que el gobierno Chino pueda imponer sobre Internet.

El valor de Bitcoin depende de su resistencia a este tipo de ataques que son los que pueden frenar su aceptación por el gran público. El núcleo de Bitcoin sin embargo no se podrá censurar nunca al igual que no se puede erradicar el uso de las matemáticas. Por otro lado, la tecnología blockchain tiene infinidad de usos y prohibirla ahora sería algo así como prohibir la imprenta de Gutenberg.

¿Cuáles son las fuerzas que han empujado al precio de bitcoin por encima de los 4.000 dólares?

El precio de Bitcoin lo determina su demanda en los mercados en los que cotiza. Esa demanda tiene una enorme volatilidad porque aún estamos en una fase muy incipiente. Lo más notable de todo esto, y es un dato muy contundente, es que a pesar de las críticas y de los duros golpes, esa demanda no ha dejado de aumentar desde que Bitcoin se creó en el año 2009. La pregunta de qué ha empujado el precio por encima de los 4.000 dólares yo la replanteo de otra forma ¿qué es lo que ha mantenido a Bitcoin por debajo de los 10.000 dólares todo este tiempo? Su relativa complejidad técnica y el desconocimiento generalizado sobre qué es el dinero es lo que hace que su demanda esté aún por debajo de lo que sería natural. También está frenado por la incertidumbre regulatoria que rodea a las criptomonedas. En este terreno la Unión Europea está dando un ejemplo de modernidad y de tolerancia ante una innovación tan disruptiva como esta.

En mi opinión el precio de Bitcoin depende sobre todo de su capacidad para comportarse como una reserva de valor. Por el momento parece que su cotización se refleja al alza cada vez que aumenta el riesgo en el sistema financiero. Eso es bueno, es necesario y es a mi modo de ver la principal aportación de Bitcoin a nuestra economía. Sin embargo el precio no refleja todo su potencial porque está frenado por la falta de encaje regulatorio.

Para valorar su potencial como medio de pago quedan aún bastantes cosas que solucionar, pero en los próximos dos años veremos avances realmente sorprendentes en este asunto.

¿Cuál es la próxima gran fecha importante para el ecosistema Bitcoin?

Pues tenemos un hito pendiente éste próximo mes de noviembre, más concretamente cuando se cree el bloque número 494.784 de la cadena. Una serie de empresarios del sector, con la idea de facilitar un compromiso entre ambas visiones sobre la escalabilidad (Segwit para Bitcoin o aumentar el tamaño de los bloques para Bitcoin Cash), propuso un término medio que incluía ambas, es decir, Segwit y además también un aumento del tamaño de los bloques a 2 Mb, de ahí el nombre de esta propuesta: Segwit2x.

Estas empresas están presionando a los desarrolladores para que aumenten el tamaño de los bloques y así dar cierto respiro inmediato a sus cuentas y a sus usuarios. Por su parte los desarrolladores se resisten a ello por los problemas que plantea un aumento del tamaño de los bloques mediante una ruptura de la cadena (hardfork, un cambio no compatible con la cade anterior). En cualquier caso va a ser un debate fascinante en el que los usuarios, los desarrolladores y las empresas tendrán que hacer su apuesta.

Si finalmente los mineros empezaran a crear bloques con este nuevo protocolo, tendremos un nuevo Bitcoin además de los dos que ya existen. Francamente dudo que esta situación se llegue a dar, salvo que el equipo de desarrolladores de Bitcoin cambie radicalmente de opinión. Entre los promotores del nuevo cambio hay varias empresas importantes en el ecosistema de las criptomonedas, como Coinbase y Bitpay. Si finalmente siguen adelante con el fork y ese Bitcoin 2x se consolida, lo más probable es que Bitcoin Cash desaparezca.

La situación ahora es de bastante incertidumbre, de ahí que los precios estén contenidos. Si el fork de noviembre no se llegara a producir, el precio de Bitcoin podría dispararse, sin embargo, si vemos una nueva ruptura de la cadena la situación sería completamente distinta. Por el momento la principal amenaza sobre Bitcoin es ese próximo bloque 494.784 y lo que puede llegar a pasar después. Ese bloque podría ser el inicio del fin para el Bitcoin más radical y el nacimiento de un Bitcoin más domesticado.

Como podemos ver, a pesar de su evolución, especialmente durante los últimos cuatro años, el actual escenario nos muestra que aún estamos en plena génesis y que a Bitcoin le queda mucha trayectoria que recorrer.

Jaime Núñez Miller es socio consultor de servicios web en Zentank, es coautor junto a Alex Preukschat del libro 'Blockchain: La revolución industrial de Internet' publicado por Ediciones Gestión 2000 (Grupo Planeta) ya disponible a la venta en Amazon.es y en la Casa del Libro. Las novedades se pueden seguir en @LibroBlockchain y LibroBlockchain.com. Ambos colaboran como Nodos en BlockchainEspana.com.

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Comentarios 1

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7gyh6uh6yg
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leyendo todo por encima.

1- me lo imaginaba, por aqui un iluminado dijo que el bitcoin solo habra 21 millones de ellos, y aun no ha llegado y ya hay empresarios que hablan de subir el tope ocn otro algoritmo presionando a los programadores.............. total, como los fiat, crear dinero sin parar.

2- el botcoin no es guardar valor, valor de que ? de un numero ?? quereis valor ? comprar una tienda y poneros a vender pizzas, eso es una valor y activo tangible, los hornos y esas cosas..., lo msimo que cualquier otro negocio sobretodo defensivo..., el bitcoin es precio, y el precio reside en la oferta y demanda,

un saludo.

Puntuación 2
#1