
Barcelona, 3 jul (EFE).- Los ciudadanos de Barcelona vuelven hoy a convivir con una nueva jornada de huelga en el metro de Barcelona, la novena en poco más de dos meses, que pone a prueba la paciencia de los usuarios, que padecen aglomeraciones y largas esperas.
Para garantizar la seguridad, Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) recurre además a las regulaciones de viajeros (cortes en la entrada de éstos en las estaciones) en los puntos de la red más utilizados, como es el caso de La Sagrera, en las línea 1 y 5.
Algunos viajeros de esta estación han señalado hoy a Efe que las regulaciones son menores hoy ya que, al tratarse del mes de julio, se ha reducido el número de usuarios habituales en otras épocas del año, como los estudiantes.
En los paros en horas punta, de 07.00 a 09.00 y de 16.00 a 18.00, los servicios mínimos establecen la circulación del 40 % de los trenes, mientras que por la noche (de 20.30 a 22.30) la oferta será el 20 % de la habitual.
TMB ha advertido, no obstante, que las alteraciones comenzarán antes y se alargarán hasta más tarde a causa del tiempo necesario para la retirada y la incorporación de trenes.
Los paros de hoy, convocados por el comité para presionar en la negociación del convenio colectivo, se producen después de que la plantilla del metro acordara la semana pasada en asamblea mantener estas protestas y hacer huelga también durante la Diada -el 11 de septiembre-; la Mercè -el 24 de septiembre- y los días de partidos de Champions del FC Barcelona.
Con esta decisión expresan su desacuerdo con la última propuesta que ha elaborado el mediador (el departamento de Trabajo de la Generalitat) en el conflicto que enfrenta a los sindicatos y a la dirección del metro en relación con el convenio colectivo.