
El tejido empresarial español mantuvo una especial fortaleza en la recta final del atípico 2016. La actividad, prácticamente inmune a más de 300 días sin Gobierno, repuntó 0,34 puntos de media nacional, según refleja el Ecobarómetro del cuarto trimestre, que sitúa a Madrid y Cataluña entre las comunidades autónomas líderes en términos de creación de empresas, contratación y nivel de solvencia de las compañías
En concreto, la Comunidad de Madrid avanzó 0,55 puntos, hasta situarse en los 50,24 desde los 49,7 del tercer trimestre. Así, la región mantuvo el cuarto puesto en el ranking autonómico y superó la barrera psicológica de los 50 puntos, a cómoda distancia de la media nacional de 48,03 puntos.
Por su parte, Cataluña mantuvo con holgura la tercera posición en el termómetro global del índice al alcanzar los 50,79 puntos, lo que supone un incremento de 0,45 puntos en el cuarto trimestre en relación con los tres meses anteriores.
Después de un tercer trimestre marcado por el tirón del Mediterráneo gracias a una temporada estival de récord, en el tramo final del año fueron Madrid y Cataluña, dos de las regiones más potentes en términos de aportación al Producto Interior Bruto (PIB), las que encabezaron el pelotón autonómico, beneficiadas por la formación de Gobierno y la mejora de las expectativas de diálogo entre Moncloa y la Generalitat.
Deshielo Moncloa-Generalitat
No en vano, en el caso del sector catalán, la sensación empresarial hasta mitad de año era especialmente negativa en términos de perspectivas de inversión por el recelo hacia un eventual Gobierno que incluyera a Podemos y diera luz verde a la celebración de un referéndum independentista.
Sin embargo, con la renovación de Mariano Rajoy al frente del Ejecutivo y la entrega de la cartera de Administraciones Territoriales a la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría, los contactos con las autoridades catalanas se volvieron más fluidos y el deshielo tuvo su reflejo en la actividad empresarial a ambos lados de las conversaciones.
Tanto que las dos regiones lograron mantener el nivel habitual y acapararon, entre ambas, el 42 por ciento del total de la creación de empresas en el cuarto trimestre de 2016, con una salvedad respecto a lo sucedido entre julio y septiembre: en la recta final del ejercicio la Comunidad de Madrid pegó un acelerón que le permitió arrebatar el primer puesto a Cataluña.
En tercer lugar se situó Andalucía, sede del 17 por ciento de las nuevas compañías en el cuarto trimestre. Un porcentaje que, sumado al 21 por ciento de Madrid y a la misma proporción de Cataluña, deja un mensaje que se repite en los indicadores: cerca del 60 por ciento de las empresas que se crean en España se establece en alguna de estas tres comunidades autónomas.