El consejero delegado de EBS, Padraig McManus, ve a a Endesa como un "competidor" en el mercado irlandés
OVIEDO, 14 (EUROPA PRESS)
El grupo energético irlandés Electricity Supply Board International (ESBI) prevé iniciar los trabajos de Construccion (ICONSTR.MC)de la planta de ciclo combinado proyectada en el concejo de Corvera a comienzos del año 2010. Esa es la previsión con la que trabaja la compañía, según confirmó hoy en Oviedo el consejero delegado de ESB, Padraig McManus.
McManus ofreció hoy en el Hotel Reconquista una rueda de prensa en la que también estuvieron presentes del director general de ESBI, Michael NcNicholas, el director de Desarrollo en Europa, Philip Clarke, el director de desarrollo en España, Jacinto Lobo, y el director del proyecto de Corvera, Larry Staines.
Los directivos de ESB mostraron su satisfacción por la calificación positiva de la Declaración de Impacto Ambiental sobre el proyecto. Así, Philip Clarke dijo que a partir de ahora están a la espera de la Autorización Ambiental Integrada que concede la Consejería de Medio Ambiente del Principado de Asturias, la autorización administrativa que debe emitir el Gobierno de España y las licencias de obra y actividad que concede el municipio de Corvera. "Esperamos que esos tres gobiernos respondan rápidamente a nuestras solicitudes, tramitando ágilmente los permisos y licencias pendientes", señaló Clarke.
El plazo de construcción de la infraestructura será de dos años y medio, según los directivos de ESB. En ese periodo se emplearán a unas 700 personas para ese proceso. Posteriormente, cuando la planta entre en funcionamiento, requerirá del trabajo de 45 personas. La vida de la planta se estipula en 25 años.
La potencia eléctrica de la planta proyectada es de 800 MW, con una inversión estimada de 500 millones de euros. Los ingresos anuales para Asturias, en concepto de impuestos serán de dos millones de euros. Según los directivos de ESBI, las subcontratas asturianas se beneficiarán de la obra con trabajos por valor de unos 100 millones.
Además de la planta de Corvera, el equipo de Desarrollo e Inversión de ESBI ha estado involucrado en otras plantas de generación eléctrica, como la de ciclo combinado de Amorebieta, en el País Vasco, la de Corby (Inglaterra), la de Coolkeeragh (Irlanda del norte) y la más reciente, el ciclo combinado de Marchwood (Inglaterra).
Philip Clarke recordó que ESBI comenzó a desarrollar el proyecto para Corvera en 2005, analizando doce posibles emplazamientos. Se decidieron por Corvera, entre otros factores, por la "buena disposición" de la firma DuPontt al negociar para que la instalación se produzca en los terrenos del valle del Tamón. Las redes de transporte de gas y electricidad de la zona fueron muy valoradas.
Clarke señaló que desde el punto de vista medioambiental, la planta de Corvera tendrá como elementos destacados un condensador refrigerado por aire, y una subestación "compacta" que reducirá en un 90% el uso del suelo y el impacto visual.
Añadió que la central producirá un 60% menos de dióxido de carbono que la centrales eléctricas de carbón tradicionales, y un 50% menos que las alimentadas con fuelóleo. No generará óxido de azufre y las emisiones de óxido de nitrógeno serán un 90% menores. Clarke cree que la planta supondrá beneficios para Corvera, sobre todo en lo que se refiere a impuestos, la creación de empleo y las oportunidades de negocio para hoteles y restaurantes "como consecuencia del gran número de visitantes regulares que vendrán de otros lugares".
ENDESA
Por otro lado, y preguntado por la llegada de Endesa al mercado irlandés tras adquirir parte de los activos de EBS, el consejero delegado de ESB, Padraig McManus, dijo que la compañía es "bienvenida" y que es recibida como un "competidor" en el mercado irlandés.
McManus señaló que la llegada de Endesa se debe a que el mercado irlandés está en proceso de liberalización, por el que se pretende que la cuota del mercado eléctrico de ESB sea inferior al 40% en 2010. Así, dijo que Endesa ganó el proceso de licitación, resaltó su experiencia y dijo que a partir de ahora va a tener un papel importante en el desarrollo del sector eléctrico irlandés.
Fuera de Irlanda, desde ESBI se pretende invertir prioritariamente en plantas en Reino Unido y España, aunque no se descarta hacerlo en otros países. Sobre si estas inversiones van a tener consecuencias para el precio de la electricidad del consumidor irlandés, McManus dio que el coste será "cero", dado que las operaciones de ESBI están separadas de las operaciones en Irlanda. No obstante, reconoció que las inversiones en el extranjero pueden traer efectos positivos para la compañía, a nivel de beneficios.
McManus señaló que ESB ha aprobado recientemente un marco estratégico que le llevará a reducir a la mitad las emisiones de carbono de la compañía dentro de un plazo de doce años y a alcanzar una posición de cero neto en emisiones de carbono para 2035.