
Barcelona, 13 oct (EFE).- UGT y CCOO de Cataluña han exigido a la administración que no acepte el ERE que afectará a 1.680 trabajadores Nissan y han mostrado su oposición radical a este despido colectivo porque la planta de la Zona Franca lleva cuatro año con beneficios, además de estudiar hacer movilizaciones.
Los sindicatos han pedido a las administraciones, tanto al Ministerio de Industria como al Departamento de Industria de la Generalitat, la máxima firmeza contra las intenciones de Nissan de despedir a un tercio de la plantilla de Barcelona, con los efectos directos que tendrá sobre la industria auxiliar del automóvil, ya que puede multiplicar por cuatro el número total de trabajadores afectados.
CCOO considera que el anuncio de estos despidos es una "verdadera barbaridad" ya que supone uno de los ajustes de personal más serios que se han presentado en Cataluña en los últimos años.
"Es una medida desmedida para afrontar una situación del mercado muy concreta, una situación coyuntural que la empresa aprovecha de manera injustificada para reducir plantilla", apunta un comunicado de CCOO.
UGT ha señalado que en los últimos años se ha instado a Nissan a presentar un plan industrial para garantizar el futuro y la viabilidad de la empresa en Cataluña y la respuesta de la multinacional fue enviar la fabricación del modelo de furgoneta X-11 a Tánger (Marruecos).
Los sindicatos instan a la Generalitat a hacer una apuesta clara para impulsar políticas industriales que potencien la competitividad de los sectores industriales, aumentando la confianza de los inversores y manteniendo un alto nivel de empleo industrial.