Los miembros del Gobierno parece que se han puesto de acuerdo para desear que el Banco Central Europeo (BCE) baje los tipos de interés. El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, cree que sería "prudente y saludable" una bajada en el precio del dinero. El vicepresidente económico, Pedro Solbes, mantiene que en la situación actual "lo lógico" es un recorte de las tasas.
El ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, ha señalado hoy que en un contexto caracterizado por un crecimiento menor de las economías europeas lo normal sería que bajaran los tipos de interés.
"Normalmente, en la situación de menor actividad en Europa, si somos capaces de rebajar los precios -cosa que parece posible si no tenemos problemas con el petróleo- lo lógico podemos pensar es que los tipos de interés del BCE bajarán", dijo Solbes en una entrevista con Antena 3.
El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, ha sido más directo. Pidió al organismo presidido por Jean-Claude Trichet que rebaje los tipos de interés para paliar los efectos de la crisis.
Durante su intervención en los Desayunos Informativos de Europa Press, Corbacho aseguró que sería "prudente y saludable" una bajada en el precio del dinero.
En cualquier caso, el titular de Trabajo aseguró que España "está en condiciones de afrontar la desaceleración", de la que dijo "no tiene su origen en el mercado laboral". Por ello, añadió que "no es el espacio laboral en el que hay que buscar la salida a la crisis".
Más aún, aseguró que el sector de la construcción, uno de los detonantes de la crisis en España, repuntará "desde 2009". Si bien, consideró necesario para acelerar esta recuperación que comunidades autónomas y ayuntamientos avancen en la simplificación de los trámites administrativos relacionados con la construcción de viviendas.
El precio oficial del dinero se mantiene en la zona del euro en el 4,25%. Los analistas creen que la institución monetaria europea podría abaratarlo ante una situación de caída de la actividad económica y si se produce una reducción de la tasas de inflación. Los economistas creen que el BCE no bajará el precio del dinero hasta el primer trimestre de 2009, o que como muy pronto lo hará en diciembre de este año.