El sindicato de funcionarios CSI-F ha reclamado este martes la contratación indefinida de 900 personas que han comenzado a trabajar para la Agencia Tributaria ayudando a los ciudadanos a confeccionar su declaración de la renta mediante el programa PADRE.
MADRID, 10 (EUROPA PRESS)
La organización que preside Miguel Borra asegura que se trata de un colectivo "de trabajadores en precario, fijos-discontinuos, que trabajan de manera temporal los dos meses que dura la campaña, con una antigüedad de hasta 15 años y un sueldo de 1.000 euros".
CSI-F reclama su contratación indefinida para labores de gestión y recaudación que hoy cubren empresas privadas, con un coste de nueve millones de euros a las arcas del Estado.
El sindicato recuerda que ya se consiguió consolidar el empleo a 100 fijos-discontinuos de Madrid y Barcelona, si bien, con la llegada de la crisis y los ajustes realizados sobre las plantillas, se frenó este proceso.
CSI-F también reclama que se reconozca la antigüedad a este colectivo por tramos anuales y no únicamente los dos meses que trabajan, tal y como reconocen varias sentencias.
"Estamos convencidos de que muy pocos contribuyentes saben que tras atender la enorme carga de trabajo de la Campaña de la Renta este colectivo volverá a sus casas sin empleo hasta la campaña del año que viene, a pesar de que su contrato se extingue y a pesar de haber superado una oposición de consolidación como fijos-discontinuos desde el año 2008", añade el sindicato, para apostillar que "esto ocurre mientras muchos servicios de atención al contribuyente se externalizan supuestamente por la falta de personal y para ahorrar costes".