Asviamie cree "histórica" esta sentencia que permite reconocer a las mujeres "doblemente ignoradas por la "contaminación extralaboral"
SAN SEBASTIAN, 27 (EUROPA PRESS)
El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Bergara (Guipúzcoa) ha condenado a la empresa ARCELOR (LOR.PA)(LOR.MC)Bergara a indemnizar con 71.519,4 euros a los dos hijos de Luisa Soraluce, fallecida por un mesotelioma, contraído al limpiar la ropa de trabajo de su marido, impregnada de amianto.
En un comunicado, la asociación de víctimas del amianto de Euskadi, Asviamie, considera que esta primera sentencia en Euskadi "posibilita reconocer a las mujeres víctimas del amianto, doblemente ignoradas por la contaminación extralaboral".
Además, ha relatado que a Luisa Soraluce se le diagnosticó en junio 2011, un mesotelioma maligno, por "contacto indirecto con el amianto" al limpiar la ropa de trabajo de su marido Jesús Ceciaga, "resultando contaminada de la fibra cancerígena", como consecuencia de lo cual falleció en octubre de 2011.
Ceciaga falleció en 1989, tras 21 años de trabajo en Altos Hornos de Bergara, más tarde Arcelor Mittal, como gruísta y encargado de fundición, por tanto con intenso contacto con amianto, utilizado como aislante y de protección de las altas temperaturas.
Asviamie ha señalado que esta empresa "utilizó amianto, por lo menos hasta 1989, e incumplió todas las medidas de Seguridad y Salud que la legislación requería". Además, ha señalado que en el fallo judicial se reconoce que el mesotelioma que padeció la mujer es "una enfermedad asociada al amianto y con un largo periodo latencia", que fue diagnosticada y confirmada tras biopsia en Neumología del Hospital del Alto Deba.
"HISTORICA".
La asociación ha calificado de "histórica" esta sentencia que "pone al descubierto, el desprecio empresarial al cumplimiento de las obligaciones preventivas, que no solo afecta a los trabajadores, pues al no lavar y dotar ropa adecuada de trabajo, traslada el riesgo cancerigeno a las familias y al medio ambiente".
Asimismo, ha considerado que "posibilita que las demandas se multipliquen por las muertes y enfermedades causadas por la contaminación domiciliaria o ambiental, generada por las empresas, obligando a gobiernos y empresas a la creación urgente del Fondo de Compensación para todas las víctimas".